Si tienes poco tiempo, te lo resumimos en estas líneas:
- Irán atacó con cientos de drones y misiles a Israel el sábado 13 de abril.
- Israel contraatacó con sus aviones y el despliegue de su domo de hierro, que es un escudo contra misiles
- La ONU advirtió a los dos países que la ley internacional prohíbe represalias
Hace décadas que ya quedaron atrás los estrechos vínculos que alguna vez hubo entre Israel e Irán. De hecho, este último fue el segundo país -tras Estados Unidos- en reconocer el Estado judío, en 1960. ¿Dónde nace la tensión entre Israel e Irán?
Hoy, por el contrario, se viven momentos de tensión entre ambos países, que derivaron en el ataque con drones lanzados por Teherán en la noche del sábado 13 de abril de 2024 hacia el territorio israelí.
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Desde Jerusalén llevan varios años señalando el peligro que supone Irán debido al enriquecimiento de uranio, a través de su programa nuclear. Además, critican el apoyo prestado desde Teherán a organizaciones islámicas como el grupo libanés Hizbulá o el movimiento palestino Hamás.
La reciente escalada se produce como respuesta, según Irán, al ataque del 1 de abril de 2024 de Israel al consulado iraní en Damasco, capital de Siria. Murieron siete miembros de la Guardia Revolucionaria, entre ellos el líder de su rama Fuerzas Quds para Siria y el Líbano, el general de brigada Mohamed Reza Zahedi. Días antes, Irán destruyó un supuesto centro de espionaje israelí en el Kurdistán iraquí.
La historia del conflicto entre Israel e Irán
Tras la llegada del nuevo régimen de los ayatolas en 1979, con el triunfo de la revolución islámica, Irán apostó por una ruptura de relaciones. Como afrenta, convirtió la embajada israelí en Teherán en la sede diplomática de la Autoridad Nacional Palestina (ANP).
Hubo incipientes acercamientos, incluida la venta de armas por parte de Israel a Irán durante la guerra que mantuvo con Irak entre 1980 y 1988. Pero, desde la llegada al poder en Irán del ultraconservador Mahmud Ahmadineyad (2005-2013) los desencuentros no cesan.
Ya el 31 de diciembre de 1999, Alí Jamenei, líder supremo de Irán, expuso la destrucción del Estado de Israel como la única solución para poner fin al sufrimiento del pueblo palestino y alcanzar la paz en Oriente Medio.
Cruce de acusaciones
En esa misma línea, Ahmadineyad, en octubre de 2005, manifestó durante un acto público que Israel debía “ser borrado del mapa” y poco más de un mes después sugirió trasladar el Estado israelí a Europa o EE. UU.
En octubre de 2009 ocurrió el primer contacto oficial desde 1979 entre las dos naciones durante un foro secreto sobre armas nucleares en Egipto, pero pronto volvieron las acusaciones y advertencias mutuas.
La llegada de Hasán Rohaní (2013-2021) al poder en Irán no calmó las aguas, y en su primer año como presidente comparó a Israel con “una herida en el cuerpo islámico que debe eliminarse”.
El actualmente primer ministro israelí, el conservador Benjamín Netanyahu, no se quedó callado. En 2015, en un discurso histórico ante el Congreso de EE. UU., denunció que el pueblo judío sufre “otro intento de destrucción” por parte de Irán. Ese mismo año rechazó el acuerdo en materia nuclear alcanzado en Viena entre Teherán y el Grupo 5+1.
El crecimiento de las hostilidades
El 9 de febrero de 2018, Israel derribó un dron iraní en su espacio aéreo y poco después atacó las instalaciones desde las que era controlado, cerca de la ciudad siria de Palmira.
En 2019 continuaron los ataques israelíes en territorio sirio contra objetivos militares proiraníes, incluido uno el 20 de noviembre, que causó una veintena de muertos.
El asesinato en 2020 del científico Mohsen Fakhrizadeh-Mahabadi, considerado el padre del programa nuclear iraní, hizo que Teherán volviera a señalar a Israel y amenazó con su destrucción. Desde entonces continúan las acusaciones mutuas sobre ataques a buques, infraestructuras energéticas e instalaciones militares.
Nada cambió con la llegada de Ebrahim Raisi a la Presidencia de Irán, pues el líder ya ha advertido que cualquier amenaza contra la seguridad de su país tendrá como resultado la “destrucción de Haifa y Tel Aviv”.
El 25 de octubre de 2023, Israel acusó a Teherán de haber ayudado “directamente” al grupo islamista palestino Hamás a llevar a cabo el ataque del 7 de octubre contra Israel, que dejó miles de muertos y más de 200 secuestrados.
La ley internacional prohíbe las represalias con uso de fuerza
El secretario general de la ONU, António Guterres, recordó que la ley internacional prohíbe “las acciones de represalia que incluyen el uso de fuerza”, dijo el 14 de abril de 2024 ante el Consejo de Seguridad en la sesión de emergencia convocada por el ataque de Irán a Israel.
El llamamiento de Guterres parece dirigido tanto a Irán -que justificó el ataque del sábado como un acto de represalia por el bombardeo de su consulado en Damasco- como a Israel, que este 14 de abril, declaró que se reserva el derecho de respuesta ante los ataques de Irán.
A esta sesión de emergencia fueron invitados los representantes de Irán, Israel y Siria, que se espera hablen tras la intervención de los quince miembros del Consejo.
Guterres dijo que “ni la región ni el mundo pueden permitirse otra guerra”. Insistió en tres ocasiones en la “responsabilidad común” que tiene la comunidad internacional para evitar una escalada entre Irán e Israel, lograr un alto el fuego en Gaza, garantizar la liberación de los rehenes en manos de Hamás y prevenir un deterioro de la violencia en Cisjordania.
El líder de la ONU mandó críticas a ambos países: a Irán, por haber lanzado “un ataque de gran escala” contra Israel, y a Israel (sin nombrarlo) por haber atacado el 1 de abril el consulado iraní, que goza de “inviolabilidad diplomática”.
“Es vital que evitemos cualquier acción que pueda conducir a una confrontación mayor en múltiples frentes en Oriente Medio (donde) los civiles ya están pagando el precio más alto”.
La ONU, otro escenario de la tensión entre Irán e Israel
Tanto Irán como Israel invocaron la carta fundacional de la ONU para cargarse de razones: primero, Irán dijo a través de su misión ante Naciones Unidas que su ataque era en aplicación del artículo 51 de la carta, que recoge los casos en que cabe invocar la “legítima defensa”.
Explicó entonces que se trataba de una represalia al ataque del 1 de abril contra su consulado en Damasco, atribuido a Israel -que lo reconoció implícitamente- y que se saldó con siete iraníes muertos y seis sirios muertos.
El 13 de abril, el embajador israelí ante la ONU, Gilad Erdan, dijo que el ataque de Irán constituye “una clara violación de la carta de Naciones Unidas” y de dos resoluciones del Consejo de Seguridad, la 2301 y la 1701.
El ataque de Irán del sábado y los tambores de guerra que suenan en la región opacaron el que era ‘tema del mes’ de abril: la petición de Palestina para convertirse en estado miembro de pleno derecho de la ONU (y no mero observador), que posiblemente se iba a votar el próximo miércoles en el Consejo, aunque con la actual coyuntura ya eso está en el aire.
Israel se reserva el derecho a represalias
El embajador de Israel ante la ONU, Gilad Erdan, subrayó que su país se reserva el derecho a las represalias, pese a los llamamientos del secretario general y de todos los países a un desescalamiento.
“Este ataque cruzó todas las líneas rojas e Israel se reserva el derecho legal a responder. No somos la rana en el agua hirviendo: somos una nación de leones”, dijo Gilad Erdan en su discurso ante el Consejo de Seguridad.
“Tras semejante ataque masivo contra Israel, el mundo entero, y menos todavía Israel, no puede quedarse de brazos cruzados. Defendemos nuestro futuro”, proclamó Erdan, que dio las gracias expresamente a Estados Unidos por su apoyo.
Irán dice que no busca “un conflicto con Estados Unidos”
Irán “no busca la escalada ni la guerra en la región” de Oriente Medio, dijo en el Consejo de Seguridad su embajador ante la ONU, Saeed Iravani, pero al mismo tiempo “no dudará en responder ante cualquier amenaza o agresión, de acuerdo con la ley internacional”.
El embajador dejó además muy claro que su país “no tiene intención de entrar en conflicto con Estados Unidos en la región”, y de hecho -subrayó- su país ha demostrado “compromiso con la paz y contención” tras demostrarse la implicación de EE. UU. en la intercepción de drones y misiles iraníes.
Ahora bien, si Estados Unidos iniciara una operación contra ciudadanos iraníes o intereses, “usaremos nuestro derecho inherente a responder de forma proporcionada”, advirtió el diplomático.