Para entregar el proyecto de Ley Orgánica de Bienestar Animal (LOBA) los activistas acudieron con sus mascotas a la Asamblea Nacional. Foto: Paul Rivas/ EL COMERCIO
Visitantes de cuatro patas acudieron a la Asamblea Nacional la tarde de hoy, 30 de octubre del 2014. El objetivo de sus dueños y de varios activistas fue entregar el proyecto de Ley Orgánica de Bienestar Animal (LOBA).
Con una camiseta azul y con un estampado blanco que simboliza el proyecto LOBA, África, una perrita negra recibió de forma simbólica el proyecto de Ley.
Camila Riera y su mascota Lou, un perro mestizo de 2 años, caminaron por las calles de Quito con un cartel que decía “Ellos si tienen voz, la mía”.
Foto: Paul Rivas/ EL COMERCIO
Para la estudiante universitaria, el hacer conocer y respetar los derechos de los animales es el acto más humano que puede existir. “Nuestro deber y velar por seres que son indefensos y que no tienen culpa de las actitudes de violencia que tienen las personas”.
Al igual que Camila varias personas con globos y con carteles llegaron a la Asamblea Nacional para apoyar el borrador de esta Ley que espera que sea aprobada y puesta en marcha en poco tiempo.
Gabriela Rivadeneira, presidenta de la Asamblea Nacional, dijo que “ya no vemos a los animales como cosas, sino como seres sensibles con derecho a estar libres de dolor”.
Además destacó que para conseguir un cambio frente al bienestar animal es importante que la cultura del país cambie. Durante la presentación de la Ley, cerca de 92 asambleístas del bloque oficialista, Alianza País (AP) dieron su aprobación para tratar la Ley LOBA.
Foto: Paul Rivas/ EL COMERCIO
Afuera de la Asamblea, Carlos Mena estaba sentado con una perrita que acababa de rescatar antes de que un vehículo la atropelle. “No alcancé a la caminata que se convocó pero estoy aquí afuera como respaldo de las personas que se encuentran en el interior de la Asamblea y que buscan al igual que yo que animales que viven en la calle tengan una nueva oportunidad”.
No sabía cómo llamarle a la nueva integrante de su familia, así que decidió llamarla Loba en honor a la Ley que acababan de presentar.