El día a día de Quito, detrás de las mascarillas

Una familia viaja en bicicleta en la av. De la Prensa, en el norte de Quito. Foto: Eduardo Terán/ EL COMERCIO

Una familia viaja en bicicleta en la av. De la Prensa, en el norte de Quito. Foto: Eduardo Terán/ EL COMERCIO

Una familia viaja en bicicleta en la av. De la Prensa, en el norte de Quito. Foto: Eduardo Terán/ EL COMERCIO

Salir a las calles en medio de la pandemia no es fácil. En un inicio, captar imágenes de una ciudad sin ruidos y solitaria resultaba extraño. Quito es otra con los locales cerrados y los parques vacíos, con puestos de control y toque de queda. Las personas también lucen distintas: sus rostros cubiertos por mascarillas las hacen ver más lejanas; y en algunos sectores, no cumplen con las medidas de seguridad. Pero también hay solidaridad, voluntarios compartiendo kits con los más necesitados y personas alimentando animales.

Una mujer camina por la calle Rocafuerte con un cartel en el que pide conservar la distancia. Foto: Eduardo Terán/ EL COMERCIO

Locales semiabiertos en la plaza de Santo Domingo, en el Centro Histórico de Quito. Foto: Eduardo Terán/ EL COMERCIO

Control de salvoconductos en la av. Naciones Unidas, en el norte de Quito. Foto: Eduardo Terán/ EL COMERCIO

Un hombre que utiliza mascarilla alimenta a las palomas de la plaza de San Francisco. Foto: Eduardo Terán/ EL COMERCIO

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