Los niños y adolescentes están más expuestos a la tecnofatiga por el uso de dispositivos electrónicos y las clases virtuales. Foto: Pexels.
La exposición prolongada y diaria a las pantallas de computadoras, tabletas, celulares y televisiones tiene un efecto negativo sobre la piel si es que no se usa protección solar. Si bien la luz que emiten estos dispositivos no quema, a largo plazo puede ocasionar manchas.
En poco más de dos décadas, los niños menores de dos años pasaron a ver el doble de contenido audiovisual en una pantalla. A finales de los noventa, un pequeño en esa edad veía una hora y media de televisión. En el 2017, esa misma población mira tres horas o más de TV o también en su tableta, celular o computadora.
El consumo de contenidos a través de las pantallas superior a dos horas diarias en niños menores de cinco años ha sido vinculado con un mayor riesgo de sufrir problemas de atención, según un estudio publicado este miércoles 17 de abril del 2019 por la revista especializada Plos One.
El uso excesivo de las pantallas electrónicas ha provocado un aumento del 50% de las personas con problemas oculares durante las dos ultimas décadas en México, según el oftalmólogo Julio Blanco Mendieta.