La semana anterior, el paÃs se estremeció ante un video que circuló por redes sociales, en el que se revelaba el maltrato a un perro en un edificio del norte de Quito. Fue tal la violencia en contra del animal y, en consecuencia, tal el revuelo en la comunidad, que las autoridades tuvieron que intervenir y llevar a la mascota a un sitio seguro. A la par -en algo propio de las redes sociales-, el escarnio tampoco demoró en llegar y hasta publicaron el número de teléfono. Pidieron algo más que justicia: querÃan venganza en contra de la mujer que, por cierto, debió cerrar sus cuentas.
Afortunadamente, este es un siglo que se muestra sensible hacia la naturaleza y, en esta, a los animales. Son cientos de rescatistas de animales, sobre todo perros, que hacen denodados esfuerzos por recogerlos, llevarlos a los veterinarios, desparasitarlos, ponerlos en adopción, hacer un seguimiento a aquellos que los acogieron para que los derechos del animal sean respetados.
El tema de la tenencia responsable de mascotas es algo mucho más serio y va más allá de que no se maltrate a un animal de la manera en que se vio la vez pasada y que ha tenido episodios, igualmente. Anteriormente, se tenÃa un perro para protección de las casas, que eran más amplias y con patios más grandes que ahora. Y las razas de los cantes también lo eran. Las preferidas eran los pastores alemanes y los boxer. Los animales comÃan las sobras de los almuerzos o alguna colada.
El crecimiento de las ciudades y hogares volcados a departamentos obligó a cambiar la costumbre. Ahora son más pequeños -el schnauzer fue tendencia-, hay que sacar a pasearlos, darles alimentos especiales. Ahora son miembros de la familia. Y esto se debe tomar en cuenta en el marco de la convivencia urbana. Implica que, como tales, también deben tener una educación para vivir más acorde con estos tiempos. Son muchas las incomodidades y quejas de vecinos porque están sometidos a los ladridos y aullidos permanentes de perros que están encerrados mientras sus dueños están ausentes. El amor a las mascotas trae consigo responsabilidades hacia el animal y la sociedad.