Faltan menos de 100 días para el Mundial y hay un entusiasmo por lo que pudieran hacer los futbolistas ecuatorianos en la Copa de Catar. La transferencia de Pervis Estupiñán a la Premier League, del Villarreal al Brighton & Hove Albion Football, alimenta ese positivismo entre los fanáticos del fútbol del país.
Ya se empiezan a crear imaginarios de lo que podría ganar Estupiñán, quien empezó en las canteras de LDU, en la liga de fútbol más influyente y tal vez más competitiva del planeta. Y esos escenarios que se plantean los fanáticos se pueden sostener porque en Inglaterra se encontrarán con los potenciales rivales que tendrán los ecuatorianos en el Mundial.
La Selección de fútbol, o Tricolor, como la llaman con cariño, se convirtió en un emblema de unión en ciudades de la Costa, de la Sierra, Amazonia y Galápagos; los ecuatorianos se ponen la camiseta de la Tri en la fecha en la que tiene previsto jugar; las empresas privadas se enganchan y promocionan sus distintos productos. El ambiente de optimismo que se genera a través del fútbol se multiplica en millares de personas y mueve la economía.
A eso se agregan los triunfos de Richard Carapaz, Neisi Dajomes, Tamara Salazar, Angie Paola Palacios, de los judocas, de las gimnastas y del sinnúmero de deportistas de otras disciplinas que se han constituido, en los últimos años, en una sustancia que alimenta el espíritu, que genera simpatías y, sobre todo, propósitos en la ciudadanía.
La mayoría de los deportistas proviene de familias con carencias económicas y disfuncionales, pero con su esfuerzo y trabajo han logrado erigirse en referentes de la sociedad; lo más gratificante es que unen al país y muestran que es viable alcanzar objetivos. Esos ejemplos deberían trasladarse al sector público y privado, a la ciudadanía que siente y muestra ese optimismo. Aunque se convierta en cliché, es necesario referirse a estas personas ejemplares en un país que casi siempre está envuelto en temas controversiales de la política, de violencia y carencias de salud. Aún hay tiempo para mostrar ese Ecuador positivo.