El MediaLab UIO ha realizado varios talleres de creación de videojuegos. Diego Pallero / EL COMERCIO
Harm es un joven que enfrenta un cuadro de trastorno maniaco depresivo. Siente un constante pesar que constantemente nubla sus momentos de alegría. Harm trata de abandonar la ciudad en la que vive y que lo está consumiendo para poder encontrarse a sí mismo y reinventarse. Para poder ser feliz.
Esta es la premisa básica con la que To Leave llegó a la tienda virtual de PlayStation en abril de este año. Y es el primer juego de Freaky Creations, empresa ecuatoriana de desarrollo de videojuegos que llegó a esta plataforma virtual.
El estudio fue fundado en marzo de 2012 y desde entonces los 12 desarrolladores que lo conformaron crearon este título, que está disponible para jugar en computadores. El juego puede ser comprado en la plataforma en línea Steam.
En esta plataforma también se encuentra Samsa y los Caballeros de la Luz. El juego, desarrollado por la empresa Atixx, está en el menú de la plataforma virtual desde diciembre de 2015, pero es el fruto de un trabajo que comenzó en 2013 como uno de los emprendimientos impulsados por el centro de innovación Prendho, de la Universidad Técnica Particular de Loja.
En este juego, Samsa es el hijo de un demonio que ha sido adoptado por los Caballeros de la Luz y ha decidido revelarse contra su naturaleza maligna para pelear por el bien y convertirse en un héroe.
Estos dos videojuegos ecuatorianos han logrado comercializarse en plataformas de alcance global. En el país existen otras iniciativas que han buscado otras vías para su desarrollo. Es el caso de El Gran Viaje, un juego desarrollado desde Cuenca que busca inmortalizar los ritos sagrados y la magia ancestral de la cultura Cañari de Ecuador. El juego actualmente está en desarrollo por la empresa Civel Games, que tiene disponible un ‘demo’ del juego descargable en civelgames.com.
La creación de estas intrincadas historias y de personajes que actúen de acuerdo con determinadas reglas que se han establecido dentro de un universo narrativo no es una tarea fácil. Así lo explica David Larrea, artista 3D, diseñador de videojuegos y profesor de Animación Digital de la Universidad San Francisco de Quito.
En esa institución educativa se han desarrollado diversos proyectos que han requerido del trabajo coordinado tanto de las carreras de Animación Digital y de Diseño Gráfico y Medios Interactivos del Colegio de Comunicación y Artes Contemporáneas (Cocoa).
Mientras que los primeros se encargan de la creación de la parte artística, en Medios Interactivos realizan la parte de la programación y multimedia. Cada proyecto se divide en tres partes: en primer lugar está la base o ‘background’, que se refiere al diseño de la historia, el ‘gameplay’ y los personajes y el funcionamiento general de la historia. De la segunda parte se encarga el área de Diseño Interactivo, y consiste en hacer que todos los parámetros que se han diseñado trabajen en concordancia y funcionen adecuadamente. En tercer lugar, explica Larrea, está la parte visual, que consiste en la presentación de estos elementos a través de diferentes pantallas para los usuarios o jugadores.
Si bien en Ecuador existe una gran audiencia ‘gamer’, su demanda de juegos es cubierta por una oferta internacional. Santiago Andrade, desarrollador de animaciones para videojuegos, explica que esto puede deberse a la complejidad inmanente a la elaboración de juegos. “No es un área fácil de la programación; no tiene una rentabilidad inmediata, no satisface una necesidad puntual de clientes, es algo más lúdico”. Según Andrade, esto provoca que empresas que pudieran invertir en la creación de juegos vean más obstáculos que oportunidades. No obstante, hay empresas que sí le han apostado a la creación de juegos de pequeña escala. Andrade explica que él ha realizado algunos juegos creados para la interacción de los usuarios, en los que se involucra el uso de redes sociales y la presentación puntual de algún producto o servicio.
Una de las principales propuestas de creación de juegos electrónicos en el país se ha gestado en el MediaLab UIO de Ciespal, donde se dicta talleres sobre creación de videojuegos. Margarita Yépez, coordinadora de la iniciativa GameLab, explica que durante este año se han realizado 7 talleres, en los que se ha tratado temas que van desde las herramientas para el desarrollo hasta la comunicación y narrativa para videojuegos.
De aquí han nacido unos 15 prototipos de videojuegos con propuestas nacidas de los asistentes y hay al menos cuatro equipos de trabajo cuyos proyectos se actualmente se están desarrollando.