La actuación tricolor en los Panamericanos fue la mejor de la historia. Se igualó el oro de Guadalajara 2011, mientras que aumentó la producción en plata y bronce.
Los siete oros, las nueve de plata y los 16 bronces justificaron los USD 482 015 invertidos por el Ministerio del Deporte para la preparación y participación de los 167 deportistas.
Jóvenes talentos sacudieron los escenarios canadienses con marcas sorprendentes en atletismo, lucha, karate, canotaje, pesas… La figura de Ángela Tenorio con sus 10,99 (10,49 récord mundial) en 100 metros dejó una estela de esperanza para una juvenil que sin complejos ingresó el grupo de la élite mundial.
Las siete historias doradas resultaron conmovedoras. El oro de la karateca Valeria Echever tuvo perfil heroico: salió del KO para en los últimos segundos ganar a la canadiense. Sin embargo los oros alcanzados por Andrés Chocho (marcha); Lenín Preciado y Estefanía García (judo); Franklin Mina y Valeria Echever (karate); Andrés Montaño (lucha) y Jonathan Martinetti (vela) nos llenaron de orgullo.
Otros resultados revelaron los conflictos de federaciones mal manejadas como Pesas y Boxeo.
En el deporte de alta competencia no existe el conformismo. Lo bueno es que el Ministerio del Deporte, el COE y los propios deportistas tienen una filosofía de elevada autocrítica. Será el único camino para crecer y llegar preparados a los Olímpicos de Río de Janeiro del 2016.