“Me siento hecho pedazos, se me acabó el año”, expresó el volante del Deportivo Quito, Santiago Morales, ayer en su cuenta de Twitter. De esta manera, el jugador demostró su malestar luego de la operación a la que fue sometido. Se prevé que el ‘Pepo’, como es apodado, se recupere entre cuatro y seis semanas de la rotura de ligamento cruzado anterior de la rodilla derecha.
Por ello, Morales no viajó con la delegación chulla para encarar hoy el partido del Quito ante el venezolano Deportivo Anzoátegui, por la Copa Sudamericana. En un inicio, su recuperación estuvo prevista en 15 días, pero las intervención quirúrgica, se determinó que volverá a las canchas máximo hasta fin de año.