El marchista Andrés Chocho sigue entrenando en su casa hasta que se reabran las puertas de los escenarios. Lo acompaña la andarina brasileña Érica Sena, su pareja. Foto tomada del muro de Facebook de Andrés Chocho
A pesar de que el Comité de Operaciones de Emergencias (COE) autorizó el entrenamiento al aire libre para los seleccionados élite, no todos han vuelto a los escenarios desde el 18 de mayo del 2020. Hay quienes siguen preparándose en sus domicilios hasta contar con todos los protocolos de bioseguridad para evitar contagios del covid-19.
En Cuenca, por ejemplo, los atletas del Plan de Alto Rendimiento se mantienen en aislamiento. Hay excepciones como las marchistas Johana Ordóñez y Paola Pérez, quienes salieron a practicar cerca de sus domicilios; mientras el nadador Esteban Enderica se entrena en una piscina privada de su familia, entre otros casos.
Según Patricia Ascaribay, coordinadora del área de deportes del Municipio de Cuenca, el protocolo que maneja la Secretaría del Deporte es distinto al de la Federación Deportiva del Azuay (FDA). Por lo tanto, está en análisis el protocolo que presentó la FDA al COE Cantonal para su respectiva aprobación.
Andrés Chocho, marchista activo y entrenador de Glenda Morejón, contó que los deportistas tienen el salvoconducto para entrenarse, pero quedan pendientes otros aspectos. Aún no está claro de cómo serán los desplazamientos a los escenarios y cómo se manejarán los protocolos de bioseguridad.
A criterio del andarín cuencano, él y sus compañeros “ahora dependen del COE Cantonal y de la Federación Deportiva del Azuay”. También dijo que no puede salir de su casa a entrenarse en las orillas de los ríos de Cuenca por el peligro existente ante la cantidad de personas presentes pese a las restricciones.
Julio Chuqui, quien dirige a siete seleccionados élite del país (incluido un atleta paralímpico y dos guías), comentó que los entrenadores presentaron un plan de contingencia para el uso del estadio atlético Jefferson Pérez y de otros escenarios. Para la tarde y noche de este miércoles 20 de mayo se tenía previsto el análisis por parte del Directorio de la FDA.
Por ahora, ya existe un acuerdo entre los entrenadores azuayos para ocupar la pista sintética y otros lugares cerrados. La pista atlética, por ejemplo, cada entrenador trabajará allí con sus dirigidos dos días a la semana y en diferentes horarios. Los estrategas quieren saber cómo será el proceso de desinfección de los escenarios y cuáles serán los protocolos de seguridad para los deportistas.