Atractivo y muy tecnológico, así es este ejemplar japonés
El CX-5 de Mazda llegó al mercado mundial hace aproximadamente tres años para establecer nuevos estándares en el mercado de los SUV compactos.
Su atractivo y convincente diseño es el resultado de la aplicación de la filosofía Kodo (alma en movimiento) del fabricante japonés, que buscó y logró darle una apariencia dinámica tanto en movimiento como cuando está detenido.
Además, fue el primero en incorporar la tecnología Skyactiv de
Mazda, que engloba una serie de elementos estructurales y mecánicos para optimizar la seguridad, el desempeño y la eficiencia energética, y de esa manera ofrecer al conductor una experiencia de manejo única e irrepetible.
El CX-5 es un SUV sumamente ágil y divertido de conducir, que complementa la deportividad que es capaz de ofrecer con atributos que lo convierten en un vehículo muy confiable y seguro.
Muestras de ello son la carrocería construida con acero altamente extensible para brindar una máxima protección a los ocupantes, los frenos de disco con ABS, EBD y BA, los controles de estabilidad y tracción, la dirección con asistencia eléctrica y el asistente de arranque en pendientes, entre otros elementos.
Cuenta, además, con cinturones de seguridad de tres puntos y apoyacabezas en todas las plazas, columna de dirección colapsable en caso de impactos y barras de protección en las puertas.
La ficha técnica
Motor: 2.0 litros 16v DOHC S-VT
Potencia: 170 caballos a 6 000 rpm
Torque: 224 Nm a un régimen de 4 000 rpm
Caja: manual o automática de seis velocidades
Suspensión: independiente en ambos ejes