Espacios abiertos, mobiliario con laca y mesones sin divisiones predominan en esa área. Fotos: Cortesía Madeval
Atrás quedó la idea de una cocina aislada, separada por varios recursos. El concepto abierto toma fuerza en este espacio, en el que predominan el estilo moderno y minimalista.
Hoy las islas, los herrajes y los acabados lisos y naturales son tendencia en este ambiente de la vivienda. Y es que con el tiempo se ha convertido en el corazón de la casa, es el centro de reuniones.
Los colores neutros y tierra lideran la lista de preferencia, seguidos por los tonos pasteles y combinaciones más atrevidas, como negro y rosa. En cuanto a mobiliario, los materiales tradicionales como la madera se mantienen, pero uno que gana fuerza es el melamínico, una alternativa económica que incluye laca brillante o acrílico para dar un acabado liso y moderno.
Tita Donoso, gerenta comercial de Madeval, explica que además de los materiales los sistemas para abrir o cerrar las puertas y cajones se colocan por dentro, como los perfiles metálicos, o se optan por sistemas eléctricos o ‘push’ (presiona para abrir o cerrar) para evitar agarraderas y obtener un diseño limpio y simple.
Los contrastes entre colores y materiales aportan un estilo único en estas cocinas.
Entre los materiales que se encuentran en tendencia para este espacio están el concreto, el hormigón, los enchapes de madera natural, la laca y el vidrio. La idea es jugar con los elementos naturales por lo que la madera se mantiene con sus vetas y acabado original, aportando un toque de calidez al ambiente.
Para la interiorista Shanty Vargas, la fórmica es otro material en auge por su variedad de colores, resistencia y fácil mantenimiento. Señala que si bien el minimalismo lidera la lista de estilos preferidos para la cocina, actualmente se busca darle un toque de calidez para generar un ambiente más acogedor.
Por ello, los enchapes de madera como el seike y el laurel se utilizan con más frecuencia en mesones, en islas y en mobiliario que se fusiona con otros materiales.
La isla es otro elemento central de las cocinas actuales. Es el corazón de ese ambiente y, en algunos casos, de toda el área social de la casa.
Las islas se convierten en el centro del área social. Incluyen desayunadores y también espacios para fregaderos y otros.
Aquí los diseños con diferentes alturas y materiales es la novedad. Según Donoso, algunas de las líneas que fabrican cuentan con las distintas alturas de las superficies.
Aquello facilita las diferentes tareas en la cocina para hacerlas más funcionales.
Se coloca, por ejemplo, un desayunador elaborado con madera a una altura de 75 centímetros y junto se añade una isla secundaria de concreto u hormigón para aumentar el área de trabajo y el espacio de almacenamiento. De esta manera se tiene, en un solo espacio, diferentes funciones.
Los fregaderos también pueden ir en la isla y ahí mismo un desayunador con la superficie un poco más elevada para diferenciar. Entre los materiales que se destacan para las islas y mesones está el porcelanato de gran formato. Este material viene en planchas de 3,28 metros por 1,54. Con esto se evitan las uniones y por ende se convierte en una superficie lisa y mucho más higiénica.
El concepto abierto y limpio está en auge, al igual que diferentes volúmenes y electrodomésticos empotrados.
La interiorista Vargas añade que la mezcla de materiales, diseños y texturas es una forma de lograr una cocina más estética, al igual que los electrodomésticos empotrados.
Sostiene que hay que recordar la funcionalidad del espacio colocando varios sitios de almacenaje y optar por herrajes que se ajusten a la dimensión del espacio para evitar que el sitio luzca ajustado.