Cereales Andinos, una empresa con 11 años de trayectoria, ha incluido quinua para preparar cereales para el desayuno y ‘snacks’. Foto: Diego Pallero/EL COMERCIO
Desde el 2015 las exportaciones del sector agroalimentario superaron los envíos petroleros, una tendencia que se mantiene este año.
Los ingresos por exportaciones de crudo cayeron a la mitad entre el 2013 y el 2016. En cambio, en ese mismo período los del sector agroalimentario crecieron 12%, gracias a la innovación de empresas que apostaron por la diversificación de sus productos.
Los envíos agroalimentarios sumaron alrededor de USD 9 000 millones en el 2016, según datos de la Asociación de Empresas Fabricantes de Alimentos y Bebidas (Anfab).
Dentro de este sector, hay dos tipos de actividades. El primero incluye a los productos agrícolas y que tienen algún proceso industrial básico. Entre estos últimos están alimentos congelados, lavados y picados.
Este segmento representa el 15% del Producto Interno Bruto (PIB). Otra actividad relevante dentro de este sector es el alimento procesado, donde existe un mayor valor agregado de la industria.
De acuerdo con datos del Banco Central del Ecuador, entre las actividades más relevantes para la economía del país están el procesamiento de carnes, de camarón, de pescado; elaboración de aceites, de productos lácteos, fideos, de chocolate y de bebidas.
El presidente ejecutivo de Anfab, Christian Wahli, explicó que la industria cerró el primer semestre de este año con resultados positivos, aunque no dio cifras. El sector espera terminar este año con un aumento de ventas gracias a una reactivación del consumo en Navidad y Fin de Año.
En esta industria trabajan, formalmente, más de 250 000 personas de manera directa.
En estas cifras, Anfab no contabiliza la actividad en campo o aquellas empresas pequeñas o que trabajan de manera autónoma.
La Cámara de la Pequeña y Mediana Empresa de Pichincha (Capeipi) registra a 210 socios relacionados con esta actividad.
Édison Romo, vicepresidente de esta organización, explicó que entre las empresas están propietarios de cadenas de panificadoras, cereales, licores, cárnicos, confitería, galletería y restaurantes.
El sector de alimentos es el más importante de la Capeipi en término de ventas. En el 2015 la facturación de estas empresas superó los USD 600 millones, manifestó Romo.
El sector ha sido objeto de regulaciones como la implementación de buenas prácticas de manufactura (ver nota inferior), el semáforo de alimentos adoptado en el 2014 y regulaciones a la publicidad.
Wahli recordó que la implementación del semáforo de alimentos redujo las ventas en las empresas, especialmente de lácteos.
Las principales categorías afectadas fueron las de yogur y quesos, según Anfab, debido a una mala categorización de sus productos. El gremio trabaja con el Ministerio de Salud para modificar la norma.
Cuando se aplicó el mecanismo, el 80% de productos registró altos contenidos de grasa, salo azúcar (semáforo en rojo). Actualmente, se registra menos de un 40% con señalética en rojo. Para alcanzar estos niveles se optó por emplear endulzantes naturales o edulcorantes artificiales.
Algunas empresas incluyeron opciones con menor contenido calórico. Otros incorporaron materias primas ancentrales y de alto contenido de proteínas como quinua, amaranto, habas, chochos en la preparación de cereales, harina, ‘snacks’ y otros.
Una de esas empresas es Cereales Andinos. Esta industria, ubicada en el norte de Quito, transforma la quinua en cereales para el desayuno y ‘snaks’.
La compañía se enfoca en un nicho de consumidores que es cada vez mayor: clientes que apuestan por productos saludables y nutritivos.
La incorporación de frutas naturales y vegetales en las bebidas ha sido otra innovación de la industria.
La industria de chocolates también ha incluido ingredientes nuevos y “con marca país” como rosas, chifles, ají, mortiño, entre otros.
El sector apuesta a crecer este año, además, impulsado por el acuerdo alcanzado con la Unión Europea, que está vigente desde enero pasado. Extractos de maracuyá, elaborados de banano, chocolate, café industrializado están entre los productos cuyos envíos han crecido hacia el bloque europeo.
Sin embargo, también existe preocupación porque aún no se han renovado las preferencias arancelarias que tiene Ecuador con Estados Unidos.
El beneficio fenecerá en diciembre e impactará a productos como: jugos de frutas, vegetales congelados, azúcar, entre otros.
Otro elemento de inquietud es el proyecto de Código de la Salud, que está en análisis de la Asamblea. El documento plantea nuevos cambios para el sector como, por ejemplo, la introducción de la figura de alimentos hiperprocesados.