La revisión vehicular es manual en el 95% de municipios de Ecuador

Un hombre revisa manualmente una camioneta en Pelileo, Tungurahua. Esa provincia no tiene centros técnicos. Foto: Glenda Giacometti / EL COMERCIO

Un hombre revisa manualmente una camioneta en Pelileo, Tungurahua. Esa provincia no tiene centros técnicos. Foto: Glenda Giacometti / EL COMERCIO

Un hombre revisa manualmente una camioneta en Pelileo, Tungurahua. Esa provincia no tiene centros técnicos. Foto: Glenda Giacometti / EL COMERCIO

Una revisión manual, sin tecnología avanzada o un mecanismo técnico. Así es el control vehicular en el 95% del país. En los centros de revisión, los técnicos solo analizan visualmente el labrado de llantas, luces, la carrocería, los gases, posibles fugas de aceite...

Actualmente, solo Quito, Cuenca, Guayaquil, Milagro y la Mancomunidad de Movilidad Centro Guayas, que abarca ocho cantones, tienen centros de revisión técnica vehicular, según datos que entregó ayer la Agencia Nacional de Tránsito (ANT) a este Diario.

Pese a la falta de estos espacios técnicos, el presidente Rafael Correa, a través del decreto ejecutivo 975, reformó el Reglamento a la Ley de Tránsito y dispuso que la revisión para el transporte público del país sea una vez al año. Antes, las unidades debían pasar por estas inspecciones dos veces al año.

En el centro de revisión de Rumiñahui (Pichincha), la evaluación de los automotores aún es manual.Santiago Granja es jefe de ese complejo y ayer admitía que existe “gran preocupación” por la reforma.

¿La razón? los buses tienen el doble de recorrido y de uso, que un vehículo particular.

Sin embargo, Iván Alvarado, director (e) de Movilidad de Rumiñahui, asegura que hay que acatar la disposición. Y agrega que si le “tocara resolver” a él este asunto “mantendría las dos revisiones”.

Rumiñahui será el decimotercer cantón en analizar técnicamente los vehículos. A mediados del próximo mes está prevista la inauguración del espacio, según Alvarado.

Pero en otras ciudades, implementar estos centros técnicos es más complejo. La Mancomunidad de Tránsito de Tungurahua, que acoge a ocho de los nueve cantones de esa provincia, reconoce que no tiene los recursos suficientes.

Necesitan USD 1 millón para construir y equipar el centro. “Esperamos financiarlo hasta el 2017”, comenta Hernán Pico, gerente de la Mancomunidad.

Mientras eso llega, Pico aclara que mantendrán los dos exámenes anuales para los más de 1 000 buses interprovinciales que operan en Píllaro, Pelileo, Cevallos, Quero, Patate y Baños.

Ambato, el noveno cantón de Tungurahua, también tiene solo controles manuales.

En el 2013, el panorama era distinto. El presidente Correa, vía decreto ejecutivo, creó la Empresa Pública de Revisión Técnica Vehicular, una entidad que estaría encargada de construir, equipar y gestionar los centros de revisión del país.

La ANT, en un comunicado del 28 de noviembre de 2013, aseguró que esa empresa pública levantaría “22 centros fijos, dos plantas semimóviles mixtas (para vehículos livianos y pesados), seis plantas semimóviles para livianos y 13 plantas móviles para motos”.

Y admitió que “esos 43 centros de revisión estarán distribuidos de manera estratégica logrando una cobertura total en todo el territorio”.

Dos años y medio después de ese anuncio, en el país solo hay cinco espacios técnicos (Quito, Cuenca, Guayaquil, Milagro y la Mancomunidad de Movilidad Centro Guayas).

¿Qué pasó? El presidente Correa, mediante otro decreto ejecutivo firmado el 6 de marzo del 2015, eliminó a Empresa Pública de Revisión Técnica Vehicular. En el documento no aparece ninguna explicación.

La ANT respondió ayer a este Diario que ahora es facultad de cada municipio o mancomunidad “autorizar, concesionar o implementar los centros de revisión técnica”.

En Azuay, solo Cuenca hace inspecciones técnicas. En los otros 14 cantones el análisis es manual y admiten que no hay recursos para un complejo especializado. Román Grijalva es uno de los dos empleados que evalúan los automotores en Gualaceo. Cada mes, por este cantón pasan unos 800 vehículos de todo tipo y el 100% aprueba en el primer chequeo.

Grijalva reconoce que con la evaluación visual no se puede verificar cómo está la suspensión, los frenos, gases…, que son importantes para determinar las condiciones mecánicas de un vehículo.

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