Hombre de 21 años que contactaba a menores por redes sociales es investigado por abuso sexual
Los nueve adolescentes fueron encontrados por la Policía en una vivienda ubicada en el sur de Guayaquil. Foto: EL COMERCIO
Fue a través de mensajes en redes sociales que Brian B., de 21 años, se contactó con una menor de edad. Entabló supuestamente una relación afectiva con la adolescente, convenciéndola posteriormente para irse a vivir con él.
El pasado viernes, 24 de agosto del 2018, la menor de edad accedió y desapareció junto a una compañera de clases a la salida del colegio. La denuncia puesta por sus padres permitió que agentes de la de la Dirección Nacional de Policía Especializada en Adolescentes, Niños y Niñas (Dinapen) dieran con su paradero en el sur de Guayaquil. En el sitio fueron encontradas siete adolescentes más (cuatro mujeres y tres hombres).
El mayor Carlos Fuel, jefe zonal de la Dinapen, sostuvo que Brian B. está siendo investigado por el delito de violación. El implicado supuestamente engañó y amenazó a una de las adolescentes para mantener relaciones sexuales.
En cuanto a la presencia del resto de menores de edad, el jefe policial detalló que según las investigaciones, en el inmueble no vivía ninguna persona adulta, por lo que los adolescentes aprovecharon para estar en parejas. La presencia de Brian B. en la casa era ocasional, ya que él residía en el norte de la ciudad, donde fue detenido. Los adolescentes eran conocidos del detenido.
Fuel manifestó que las menores de edad fueron por cuenta propia y habían llevado prendas de vestir para cambiarse y pernoctar en la vivienda.
En el sector donde ocurrió el hecho los moradores contaron que no es la primera vez que se veía a adolescentes entrar al inmueble. Los menores de edad aprovechaban la salida del colegio para llegar al sitio y permanecer algunas horas.
Sobre los menores de edad recuperados el miércoles, 29 de agosto, subrayaron que ellos entraban y salían de la casa a toda hora, sin zapatos. No se escuchó música a todo volumen y desconocen si existió consumo de bebidas alcohólicas o estupefacientes. El jefe policial puntualizó que eso está en investigación.
En el inmueble aún quedaron cuatro empaques de preservativos usados, un soporte de cama, una cajonera vieja y dos interiores. La propietaria de la casa cerró con candando el lugar.
