Extorsiones en la red virtual se agudizaron durante la pandemia en Quito

En octubre, agentes realizaron un operativo en el sur de Quito y detuvieron a una banda. Foto: Cortesía

Las fotos y videos íntimos de 30 personas estaban almacenados en una computadora, en tres celulares y en dos memorias extraíbles. Este material fue hallado por agentes que hace 15 días incursionaron en una casa del sur de Quito, desde donde operaba una banda que extorsionaba en la red virtual.
El operativo terminó con la captura de cuatro personas.
Los agentes encontraron USD 420 en efectivo y 19 depósitos bancarios con montos entre USD 150 y USD 1 200.
Según las indagaciones, esta banda creaba perfiles falsos en redes sociales para captar a las víctimas. Así, enviaban invitaciones a jóvenes y tras un acercamiento paulatino, solicitaban videos o fotos de carácter sexual. Cuando los obtenían exigían dinero, a cambio de no hacer públicas las imágenes. Estos casos son conocidos como ‘sextorsiones’.
De enero a septiembre se han reportado 1 417 denuncias en el país. La mayoría de casos se reportó a partir de julio, en medio de la emergencia por el covid y el uso masivo de equipos tecnológicos.
La Policía Judicial de Quito conoció hace un mes el caso de Melisa, una joven de 27 años.
En su escrito, la mujer relató que el 6 de agosto recibió a través de Facebook la solicitud de amistad de un desconocido. Por este medio conversaron dos meses y mantuvieron una relación amorosa virtual.
El hombre le pidió videos íntimos y ella los envió. Pero luego le dijo que si no le pagaba USD 500 difundiría esas imágenes. La chica contó a los agentes que no soportó la presión y realizó el depósito. Dijo que fue a la Policía, porque tras ese pago siguió la extorsión.
Las provincias con más denuncias son Pichincha, Guayas, El Oro, Manabí y Azuay.
En la Fiscalía también reposa el caso de María del Carmen.
El 13 de agosto, un desconocido le envió por WhatsApp cinco fotos íntimas que ella tenía almacenadas en su computadora. En otro mensaje, un hombre amenazó con difundirlas por Internet si no hacía una transferencia de USD 500. Después de 15 días le tocó pagar otros USD 600.
Según las investigaciones, el sospechoso ingresó ilegalmente a la computadora de la joven con un virus informático y robó los datos personales.
Agentes que rastrean este delito saben que las bandas también envían enlaces maliciosos a través de páginas web, para infectar los equipos de las víctimas. Esta es una forma de operar de las bandas que cometen ‘sextorsiones’.
Un jefe policial indicó haber conocido casos en que las bandas piden hasta USD 6 000 por no difundir las imágenes.
Personal de Inteligencia muestra que los cabecillas de estos grupos operan en Ecuador, Colombia, Perú y Brasil.
El 15 de septiembre, la Policía de Guayaquil conoció el caso de Mónica, una mujer de 30 años. Ella contó a los agentes que tuvo que acceder a un préstamo de USD 2 000, luego de que un hombre que conociera en Facebook la chantajeara con entregar fotos íntimas a su jefe y a sus compañeros de trabajo. La chica depositó en una cuenta de Colombia.
Este delito es sancionado con cárcel de uno a tres años.
Así lo establece el Código Penal (art. 178). En la Asamblea se tramita un proyecto de ley que busca incrementar la pena hasta 10 años de cárcel por casos de violencia sexual digital.
La idea es evitar que ocurran casos como el de Nubia. A través de Twitter, la joven dio a conocer que un hombre que conoció por redes sociales la extorsionaba con tres videos sexuales que ella le envió por Facebook. El sospechoso le exigió USD 600, pero no depositó y denunció a la Policía.
Agentes rastrearon el móvil con el que este enviaba los mensajes extorsivos y localizaron su casa, en el sur de Guayaquil.
Durante un operativo fue detenido. Actualmente, los agentes investigadores tienen convenios con Facebook y WhatsApp. Estas compañías proporcionan los códigos y la ubicación desde dónde se envían esos mensajes y así logran rastrear a los ciberdelincuentes.