Los dos asaltantes subieron al bus dos kilómetros antes del robo. Y realizaron tres disparos, el primero reventó uno de los cristales del flanco derecho del colectivo. Mientras que uno de los impactos de bala resultó mortal para un militar que intentó atrapar a un delincuente en medio de un robo a una unidad de transporte público.
El asalto a un bus de la línea 131 Las Orquídeas se registró alrededor de las 05:30, este jueves 26 de mayo del 2022. El conductor del bus contó los momentos de horror que vivió junto a sus pasajeros, tras el robo que condujo al asesinato de un suboficial de la Fuerza Aérea Ecuatoriana.
Los asaltantes se subieron a la unidad en Los Vergeles y sacaron sus armas poco después, cuando el bus descendió de la avenida Francisco de Orellana hacia Samanes por la Av. Teodoro Alvarado. Allí los asaltos son recurrentes.
Desarrollo del robo
“Primero me apuntaron a mí en la cabeza, con un revólver, y avisaron que era un asalto”, dijo el conductor, aún consternado, quien prefirió no identificarse. “No es la primera vez que me toca vivir un asalto tan violento”.
La unidad circulaba llena, con unos 35 pasajeros, todos víctimas de los asaltantes. Y el suboficial, identificado como Carlos Sigcha Moya, se opuso al asalto y comenzó a forcejear con los delincuentes.
El militar en servicio activo, de 48 años, viajaba en el bus sin uniforme ni armas y se dirigía a la base aérea Simón Bolívar. Tras el primer disparo, los sujetos se apresuraron a bajar de la unidad y el suboficial agarró a uno de los delincuentes, contó el chofer. “Pero el otro le disparó desde abajo del bus, dos veces”.
El conductor tuvo que conducir cerca de un kilómetro y medio más, hasta una unidad de policía comunitaria ubicada en la avenida José Luis Tamayo, en el sector de Polaris, donde se confirmó la muerte del suboficial.
La sangre quedó esparcida en el piso, en las escaleras y en la puerta de acceso a la unidad. Los conductores de la línea 131 denunciaron que muchas de las cámaras y los botones de seguridad de las unidades están inhabilitadas por falta de mantenimiento del programa de seguridad.