Rómulo Montalvo deja la cárcel de Cuenca tras la masacre

Rómulo Montalvo recibió de la Policía, el pasado jueves, el control y manejo del CRS Turi tras la masacre de 34 reos.

Casi al mismo tiempo que la renuncia del Ministro de Gobierno, Patricio Pazmiño, también dejó la Dirección del Centro de Rehabilitación Social Turi (CRS-Turi) de Cuenca, Rómulo Montalvo. En su lugar quedó encargado Polivio Aymar, quien se desempeñaba como director de pabellones.
Montalvo es un coronel en servicio pasivo y estuvo apenas 10 meses al frente de este centro penitenciario, en plena crisis carcelaria. Ha dicho que su renuncia responde a temas personales. En su período se registraron varios motines y actividades que son consideradas ilegales dentro de los centros carcelarios.
Pero el más grave fue la masacre de 34 internos en el pabellón Tomebamba, de máxima seguridad, por parte de sus propios compañeros. 18 fueron decapitados, con el uso de una amoladora eléctrica, otros desmembrados y quemados.
En junio del 2020, dos meses después del inicio de la administración de Montalvo, ocho internos intentaron fugarse tras romper los barrotes y se registró un fuerte amotinamiento en reclamo de mejores condiciones de salud frente a la pandemia del covid-19.
En esa ocasión se destruyeron 65 cámaras de vídeo vigilancia, la estación de enfermería y otros espacios de la parte administrativa. En este año de la pandemia, decenas de internos se contagiaron del virus y unos fallecieron.
El 9 de julio, un interno de nombre Roberto, de 32 años, fue encontrado ahorcado en su celda, a pocas horas de ser trasladado a otro pabellón, supuestamente por agresiones físicas y amenazas de muerte que había recibido. El hombre llevaba un año preso por el delito de robo.
Unos días después, en agosto, se difundieron en las redes sociales dos vídeos de fiestas masivas de internos que se desarrollaron dentro del CRS-Turi en pleno estado de excepción. El primero habría ocurrido el 28 de julio.
Hubo música, un asadero con carnes y en el piso la figura de un lagarto grande prendido en llamas. Cuatro internos le apuñalaban por todo su cuerpo y entre el bullicio y las arengas se escucha una voz que decía “córtale la lengua”.
Seis días después se produjo el violento enfrentamiento a tiros entre las bandas de Los Choneros y Los Lagartos, que dejó 11 muertos y 26 heridos en la Penitenciaría del Litoral.
El segundo vídeo fue de la celebración del cumpleaños de uno de los cabecillas de la banda de Los Choneros, según familiares de los internos. Hubo música, aplausos, baile y hasta pasteles. Los presentes coreaban el vallenato “Que Dios te bendiga”.
En días posteriores a eso se filtró otro vídeo de alias El Mangajo, bebiendo alcohol y festejando con otro recluso acusado de un femicidio que conmocionó a los cuencanos. Estos hechos ilegales, por el uso de elementos prohibidos, han sido parte de la administración de Montalvo.
El jueves 4 de marzo –nueve días después de la masacre- la Policía Nacional había entregado a Montalvo el centro penitenciario tras retomarse el control, manejo y las actividades internas en las distintas áreas.
Montalvo había dicho que con eso ya empezaron a operar –de forma progresiva- los talleres, pero que las visitas íntimas y de familiares se mantenías suspendidas hasta que se realice un análisis que determine si es procedente o no retomarlas a partir del lunes 8 de marzo.