Arquidiócesis estuvo posesionada del predio No. 105-702 desde 1935. Foto: Eduardo Terán/ EL COMERCIO
Intranquilos, así se encuentran algunos habitantes de la parroquia de Nayón desde el pasado lunes 5 de junio, luego de enterarse de que los predios que comprenden el santuario de la localidad fueron declarados como un bien mostrenco, es decir, de propiedad del Municipio de Quito.
La declaratoria fue realizada en 2016, sin embargo la comunidad asegura no haber sido informada al respecto por parte del Gobierno Autonómo Descentralizado (GAD), quien fue el que solicitó la declaratoria. “Llegamos a conocer este tema porque un juez había dispuesto la medición de los predios, es ahí cuando empecé a preguntar y me comunicaron que toda la cuadra que pertenecía a la Curia pasó a manos del Municipio“, explicó el padre Leonardo Merino, párroco de Nayón.
Por su parte Lourdes Quijia, presidenta del Gobierno Autónomo Descentralizado de Nayón, señaló que mantuvo reuniones con los moradores para informarles sobre la solicitud que se encontraba realizando para que se declare al predio como bien mostrenco.
Lourdes Quijia, presidenta del Gobierno Autónomo Descentralizado de Nayón. Foto: Eduardo Terán/ EL COMERCIO
Según el párroco la Arquidiócesis estuvo posesionada del predio No. 105-702 desde 1935, sin embargo nunca tuvieron un título de propiedad. “Estamos preocupados porque en ese espacio que está en conflicto pensábamos construir un templo en honor a nuestra patrona Santa Ana de Nayón, pero ahora ya no lo podremos hacer”, señaló el padre.
El padre Leonardo Merino, párroco de Nayón, junto a los moradores de la parroquia Santa Ana de Nayón. Foto: Eduardo Terán/ EL COMERCIO
En cambio la presidenta del GAD asegura que ese predio y las instalaciones que allí se encuentran prestan servicios para el bienestar de la comunidad. “Yo voy a luchar porque se respete esos espacios que están destinados para la gente”.
Dilson Reinoso es uno de los dirigentes barriales que asegura que nunca existió una socialización para saber si la comunidad quería que el bien pase a manos del Municipio o continúe en posesión de la Iglesia. “Nayón es un pueblo católico y nos sentimos traicionados. No vamos a permitir que continúe esta situación”, dijo.
Los moradores indicaron que continuarán realizando acciones, mientras que la presidenta del GAD afirmó que está abierta al diálogo.