En Quitumbe, la noche del viernes 27 de abril del 2018 salieron 33 700 personas principalmente con destino a Guayaquil, Ambato, Latacunga y Santo Domingo. En la foto, desde la terminal de Carcelén este sábado 28 de abril. Foto: Isabel Alarcón / EL COMERCIO
Las terminales terrestres de Quito recibieron la mañana de este sábado 28 de abril del 2018 a quienes buscaban un boleto para salir de la capital durante este feriado del 1 de mayo.
El movimiento fue intenso tanto en la estación de Quitumbe como en la de Carcelén, aunque los operadores admitieron que ha sido menor que el feriado pasado.
Según la Empresa Pública Metropolitana de Movilidad y Obras Públicas (Epmmop), el viernes se registró la venta de alrededor de 50 000 boletos y la salida de 1 716 frecuencias desde la terminal Quitumbe y Carcelén.
En la terminal del norte se formaron largas filas en busca de pasajes para Otavalo, Ibarra y Tulcán, que han sido los destinos más demandados desde este punto.
Isabel Erazo, de Panamericana Internacional, cuenta que los viajeros también buscan boletos para Guayaquil. Los cupos para viajar a ese destino se terminaron en esta empresa desde el viernes.
Algunas operadoras tuvieron que aumentar sus frecuencias. Edison Valencia, de Transportes Baños, explica que, normalmente cuentan con cuatro unidades, pero para este feriado añadieron dos unidades más. En Transportes Baños, desde la terminal Carcelén el destino más solicitado fue Lago Agrio.
Ambos coinciden en que el día de más movimiento fue el viernes por la noche, donde se vendieron 16 333 boletos. En Quitumbe, la noche del viernes salieron 33 700 personas principalmente con destino a Guayaquil, Ambato, Latacunga y Santo Domingo.
Los controles a los buses, antes de su salida, serán constantes en las terminales. José Guerrero, agente metropolitano de Tránsito, se ubicó en el parqueadero de buses de la estación Carcelén para realizar la revisión. Allí, cuenta, se verifica el estado del transporte.
El procedimiento incluye la revisión de cintas reflectivas, espejos, parabrisas, botiquín de primeros auxilios y llanta de emergencia. También se verifica que los neumáticos estén en buen estado y que el labrado no sea menor a 1,6, como lo estipula la ley. En los buses que tienen cámaras, se comprueba que estas estén funcionando.
Los conductores que aprueban esta fase, pasan a la revisión de sus documentos y, una vez que completan todos los pasos correctamente, los buses salen de las estaciones.
Según la Epmmop, se espera que durante este feriado salgan 127 000 personas de ambas terminales. En el feriado de Carnaval se movilizaron cerca de 350 000 ciudadanos.