En Quito se habilitó el tercer Laboratorio Urbano, que está ubicado en la calle Alpahuasi, entre la avenida Napo y Chambo, sector de Chimbacalle, en el sur.
Los laboratorios urbanos son una estrategia del Municipio de Quito, que la impulsa a través de la Secretaría de Territorio, Hábitat y Vivienda conjuntamente con colectivos y ciudadanos.
Se busca fortalecer las áreas históricas patrimoniales que tiene el barrio y fomentar un turismo urbano para generar fuentes de empleo.
Vladimir Tapia, secretario de Territorio, Hábitat y Vivienda, se refirió a este proyecto como una alternativa que surgió en el 2020 para la reactivación económica y buen uso del espacio público para que los locales comerciales puedan utilizar las veredas o las calles y ampliar el aforo respetando los distanciamientos y las medidas de bioseguridad que por pandemia estaban restringidas.
Además de ser una estrategia de seguridad, “mientras más se use el espacio público más seguridad hay en la ciudad, en las calles en los barrios”, afirmó.
En la actualidad, los laboratorios urbanos son espacios dedicados a la reactivación económica a través de emprendimientos locales y un impulso para fomentar actividades culturales e incentivar iniciativas de startup.
La acogida de la ciudadanía por estos espacios ha permitido que se repliquen estos laboratorios urbanos en otros puntos de la ciudad como en el sector de Iñaquito cerca del colegio de Arquitectos y Cumbayá, ubicado en el centro. Se tiene previsto implementar estos laboratorios en el sector de Cotocollao y Ponceano.
Mientras que, en Chimbacalle, el domingo 28 de noviembre se inauguró la tercera etapa, los ciudadanos fueron los protagonistas de la regeneración de su sector donde 150 personas participaron para pintar murales, pasajes, escalinatas.
Los alrededores de la estación de ferrocarril también recibieron mantenimiento, se pintó las veredas y crearon un sitio seguro para que el peatón pueda transitar.
Otros ciudadanos aprovecharon para mostrar sus emprendimientos, su arte y cultura.
Melissa Santamaría, presidenta de la Fundación Habitar Colectivo, explicó que estos procesos participativos han permitido que la comunidad se apropie de estos espacios y uno de los ejes que se está trabajando es la productividad.
Con la iniciativa denominada Emprendemos se ha dedicado exclusivamente a identificar a los emprendedores de Chimbacalle y brindarles talleres, capacitaciones. Para ello hay un programa de formación para que puedan implementar nuevas estrategias de giro de negocio.
Los laboratorios urbanos son una estrategia se han trabajado bajo autogestión de la ciudadanía, apoyo de la empresa privada y del Municipio.