El colectivo de jóvenes ‘Bache Florido’ acudió la noche de hoy, miércoles 14 de marzo del 2018, a la intersección de las calles José Yépez y Guatemala, ubicadas en el sector de las cuatro estacas de San Juan, centro de Quito.
Su objetivo: continuar con su proyecto de sembrar plantas ornamentales en los baches y así solicitar al Municipio que arregle las vías. También que se logre “enverdecer” la urbe.
Pablo Cisneros está al frente de esta iniciativa en la capital. Desde que comenzó el proyecto -indicó el activista- se han sembrado unas 25 plantas en las calles 18 de Septiembre y Versalles, calle Equinoccio, en el barrio El Dorado, en la vía Intervalles a la altura de Cununyacu, en las avenidas De los Shyris y Eloy Alfaro, entre otros sitios.
El colectivo de jóvenes ‘Bache Florido’ sembró una planta en la intersección de las calles José Yépez y Guatemala, ubicadas en el sector de las cuatro estacas de San Juan, centro de Quito. Foto: Eduardo Terán / EL COMERCIO
Esta noche, él y otras personas del colectivo sembraron plantas en tres baches de la calle José Yépez como un acto simbólico. Les hicieron fotos para publicarlas en redes sociales. Luego las retiraron para que no sean aplastadas por los vehículos.
En otros casos cuando las plantas están en lugares que no se exponen a ser maltratadas, indica Cisneros, estas se quedan allí. Luego las llevan a puntos más seguros como jardineras públicas o parques. Resaltó que con el Municipio de Quito se lograron acuerdos importantes. Uno es que, por cada bache tapado, la entidad se compromete a entregar una planta. “Se supone que con ello comenzaremos este fin de semana, deben avisarnos”.
Los baches de la calle José Yépez, en San Juan, en Quito fueron ‘tapados’ con plantas ornamentales. Foto: Eduardo Terán / EL COMERCIO
Más vecinos se unieron esta noche al proyecto y donaron plantas. Rosario Pinto los acompañó. “Las calles están dañadas y es necesario que más autoridades lo tomen en cuenta”.
Coraima Torres se quejó de que los huecos son un problema recurrente en las cuatro estacas. “Las plantas son seres vivos y, al sembrarlas, los conductores no conducirán en altas velocidades ya que estas son seres vivos y deben respetarlas”.