Vehículos de la Epmaps recorrieron Píntag, Alangasí y La Merced distribuyeron agua. Foto: Cortesía Epmaps
Los tanqueros de la Empresa Metropolitana de Agua Potable y Saneamiento (Epmaps) recorrieron desde las 08:00 de ayer (4 de abril del 2021) los barrios y comunidades de Píntag, Alangasí y La Merced, al oriente de Quito.
En esas parroquias se cortó el suministro del líquido vital por daños en la tubería matriz de la línea de conducción El Volcán, que abastece a la zona.
El hecho se reportó aproximadamente a las 20:00 del sábado.
Inmediatamente, los equipos de emergencia fueron trasladados a ese sector para verificar los daños que se produjeron por un deslizamiento de tierra, debido a las fuertes lluvias, indicó Jaime Garzón, gerente de Operaciones
del ente municipal.
Desde las 06:00 de ayer (4 de abril del 2021), obreros acudieron al punto para cambiar la tubería de concreto y sus uniones. En total se invirtieron USD 15 000 en varillas, material pétreo, cemento, mano obra, entre otros.
Algunos lugareños se enteraron de lo que ocurrió a través del comunicado que la Epmaps difundió en redes sociales la noche del sábado. Por eso, al otro día estaban atentos cuando los tanqueros pasaron por sus poblados para abastecerse de agua. Otros no se enteraron de la emergencia y los tomó por sorpresa.
Ayer (4 de abril del 2021) temprano, apenas escuchaban a los vehículos de Epmaps, los vecinos salieron rápidamente de sus casas con baldes, tinas, canecas y botellones. Algunos madrugaron para hacer fila junto a los tanqueros. Tras llenar sus recipientes, regresaron a sus viviendas y comentaron que al fin consiguieron agua para preparar la comida.
Hubo moradores que se reunieron en puntos específicos. Por ejemplo, a las 11:30, en el barrio La Cocha de la parroquia La Merced, se concentraron frente a un restaurante de carnes preparadas al carbón para recibir su ración de agua.
Allí, todos utilizaron mascarilla, pero algunos no respetaron el distanciamiento en la fila. Se demoraron entre 10 y 15 minutos en llenar sus envases.
“No tengo con qué lavar los platos, nunca nos enteramos de lo que pasó, todo ocurrió de un momento para otro”, manifestó Dina Pacha, propietaria de un restaurante en La Merced, que se abasteció de agua llevada por un tanquero.
Lo mismo indicó el morador Pablo Quinga. Acotó que desde hace tiempo atrás tienen problemas con el servicio de agua en su parroquia. “Nos salvó el carro repartidor de la Epmaps, que estuvo aquí a las 09:00”, relató. Él solicitó a las autoridades municipales que se cambiara de tubería en toda la parroquia, porque se encuentra muy deteriorada.
Problemas similares hubo en Alangasí, en donde la gente estaba molesta. “Cerca de las 21:00 comenzó el problema. Preparamos el desayuno con agua embotellada. No nos hemos podido bañar por esta emergencia”, manifestó Teresa Avilés, propietaria de una tienda de abarrotes localizada en el centro de esa localidad, junto a la iglesia.
Eva Chungana contó que siempre tienen problemas. Considera que el líquido vital que se consume en su pueblo es de baja calidad. Esperaba que las autoridades restituyesen pronto el servicio.
También hubo malestar en Píntag. En la cuenta de Facebook del GAD de esa parroquia, la gente expresó su incomodidad. Pedro Morales indicó que la tubería se encontraba en malas condiciones desde el sábado. María Fernanda López manifestó que si el servicio de agua no se restituye pronto, los tanqueros deberán madrugar para ayudar a la gente.
Frente a las quejas de la ciudadanía por el desabastecimiento de agua, Garzón ofreció disculpas y aseguró que emergencias como las del fin de semana son fortuitas, pues se trató de un deslizamiento de tierra que fue causado por las lluvias en la zona.
Los técnicos de la Empresa de Agua Potable esperaban restablecer el servicio a la normalidad, la noche de ayer.