Redacción y Ansa
Una guerra de comunicados y malentendidos entre la dirección nacional del Partido Popular y los dirigentes de esta agrupación en la comunidad valenciana se convirtió en noticia de primera plana en los medios españoles, el 14 de octubre.
En detalle
María Dolores de Cospeda, secretaria de Organización del PP aseguró que el cese de Costa se debe a las “compañías poco edificantes” del ex secretario general de Valencia.
Ángel Luna, portavoz socialista en las Cortes Valencianas, ha denunciado que “Camps ha hecho de la mentira su principal instrumento de acción política”.
El vicesecretario de Política Autonómica y Local, será César Augusto Asencio. Titulares transcritos de un comunicado oficial del partido como: “el PP destituye temporalmente a Ricardo Costa”, secretario general de la Generalitat de Valencia “a petición propia” y, lo citará a declarar a la sede nacional para que “pueda explicar su posición”, contradecían las declaraciones que un día antes Costa hacía sobre su participación en la trama del caso Gürtel y en las que dejaba saber que no era su voluntad dimitir a su cargo.
El caso es que luego de un pulso de poder entre Mariano Rajoy y Francisco Camps, el partido derechista afronta un escándalo de corrupción del cual sus líderes más representativos se desmarcaron.
De acuerdo con las dispocisiones del PP, Costa tendrá que declarar ante el Comité de Derechos y Garantías del Partido. Tanto en sus declaraciones del miércoles 14 por la mañana como en la rueda de prensa posterior al Comité Ejecutivo Regional -qué decidió su suspensión-, Ricardo Costa aseguró que siempre cumplió con las “directrices” de la formación que preside Mariano Rajoy.
El informe policial
Hace dos semanas, un informe policial publicado por varios diarios españoles reveló que la dirección de los populares en Valencia organizó una financiación ilegal mediante “doble contabilidad” con la empresa Orange Market, ligada al empresario Francisco Correa, presunto líder de la trama de corrupción. Según el documento, Orange Market, empresa con la que el PP organizaba actos de campaña, le presentaba doble facturación por sus servicios, hecho conocido al parecer por Costa y otros dirigentes populares en Valencia.
Al respecto, Costa dijo que la empresa trabajaba con el partido antes de que él “tuviera cualquier tipo de responsabilidad orgánica en el partido”. Sostuvo también que la dirección nacional del Partido Popular nunca le pidió que no contrate con Orange.