El expresidente Gustavo Noboa el 14 de agosto del 2003. Noboa murió la mañana de este 16 de febrero de 2021, a causa de un infarto. Así lo confirmó a este Diario Joffre Campaña, amigo personal del exmandatario. Foto: Patricio Terán / EL COMERCIO
Uno de los primeros políticos en comentar sobre el fallecimiento de Gustavo Noboa Bejarano fue Alberto Dahik. En su cuenta de Twitter, el exvicepresidente señaló que fue un mandatario honrado y responsable, que condujo al país con acierto en momentos muy duros. Asimismo, dijo que su legado no tiene que ver solo con la política ecuatoriana sino con la sociedad en general.
“Fue un educador insigne, un formador de juventudes como ningún otro en Ecuador. Un seglar comprometido con la Doctrina Social de la Iglesia y con el Concilio Vaticano II. Un hombre público que dejó una trayectoria intachable de honradez, responsabilidad y corrección. Lo conocía desde que tengo 16 años de edad, desde aquel tiempo desarrollamos una entrañable amistad”.
El exmandatario murió la mañana de este 16 de febrero de 2021, a causa de un infarto. Así lo confirmó a este Diario Joffre Campaña, amigo personal del exmandatario. La semana pasada, el expresidente viajó a Estados Unidos por complicaciones médicas y hace unos días fue sometido a una operación quirúrgica de la que, según sus familiares, se estaba reponiendo con éxito.
Campaña coincide con Dahik y señala que fue un hombre íntegro y un estadista, “yo inclusive lo llamaría un patriota, que se dedicó a formar juventudes”.
Gustavo Noboa asumió la presidencia de Ecuador luego del derrocamiento del entonces mandatario Jamil Mahuad, en enero del 2000. En su mandato ratificó el proceso de dolarización y le tocó enfrentar la reconstrucción de la Costa devastada por el fenómeno de El Niño.
En agosto de ese año logró la renegociación de la deuda externa, luego de la moratoria declarada por Mahuad. Años después, por este tema, fue acusado por León Febres Cordero, quien lo acusó de supuesta malversación de fondos.
La justicia ordenó su prisión, eso llevó al expresidente Noboa a pedir asilo en República Dominicana. Se refugió en la embajada en Quito hasta que pudo salir del país tras la demora del gobierno de Lucio Gutiérrez de entregarle el salvoconducto.
Gustavo González, yerno de Noboa, cuenta que luego de la operación, el exmandatario se mantenía de buen ánimo y lúcido, conversaba con su familia y hasta se dio tiempo de escribir en su cuenta de Twitter. En el último tuit que redactó se lee: “Gracias a todos por sus deseos, me encuentro ya en recuperación y vamos adelante. Bendiciones a todos”.
González confirmó que el infarto sucedió dentro del hospital. “La operación había sido un éxito, por eso todos estamos sorprendidos con lo que ha pasado. Fue un infarto masivo, como un balazo”. Asimismo, dijo que recién mañana se sabrá cuándo podrán volver con el cuerpo del exmandatario.