La elección de Francisco Sierra como director del Centro Internacional de Estudios Superiores de Comunicación para América Latina (Ciespal), en febrero, no ha perdido su carácter polémico.
El académico español, con una larga trayectoria en su país en materia de comunicación, fue elegido el 26 de marzo pasado. En esa sesión del Consejo de Administración, solamente votaron seis de los 11 miembros que lo integran: Cancillería, Universidad Central, Universidad de Guayaquil, Comisión Nacional de la Unesco, Televisión Educativa para Iberoamérica (TEIb) y Senescyt.
Mientras que los representantes de la Organización de Estados Americanos (OEA), Asociación Ecuatoriana de Radiodifusión (AER) y la Asociación para el Progreso de las Comunicaciones (APC) estuvieron ausentes de la cita.
En cambio, los delegados de la Unión Nacional de Periodistas (UNP) y la Federación Nacional de Periodistas (Fenape), estuvieron presentes, pero en el momento de votar, prefirieron abandonar la sesión como manifestación de su inconformidad por las normas estatutarias y la modalidad como se había llegado a esta sesión.
La existencia de un solo candidato, auspiciado por la U. de Guayaquil y TEIb fue la causa de la salida de los dos gremios periodísticos. Además, como el estatuto de ese centro de formación para periodistas solo permite que se vote a favor; no se puede votar en contra, abstenerse o anularlo, prefirieron no votar esa tarde.
“Es una imposición. El procedimiento impide una opinión discrepante”, dice Guadalupe Fierro, representante de la UNP ante Ciespal.
El perfil del nuevo director, quien asumirá sus funciones en junio, no estuvo en cuestionamiento por ninguna institución que forma parte del Directorio. Es profesor de la Universidad de Sevilla y tiene un doctorado por la Universidad de Salamanca, además de ser el director del Grupo Interdisciplinario de Estudios en Comunicación, Política y Cambio Social y vicepresidente de la Confederación Iberoamericana de Asociaciones Científicas en Comunicación.
Lo que se cuestionó es su origen español para hacerse cargo de una entidad con competencia regional. “Hubiera sido deseable un candidato de América Latina. Tenemos profesionales con la misma competencia, experiencia y estudios que Sierra”, añade Fierro.
Sierra fue uno de los beneficiados por el Proyecto Prometeo, una iniciativa para “fortalecer la investigación, la docencia y la transferencia de conocimientos”, de investigadores del extranjero y ecuatorianos residentes en el exterior, según señala la página oficial de la Senescyt.
De hecho, cuenta Fierro que durante la reunión fue el representante de la Senescyt, Julio Peña, quien confirmó “que Sierra era su candidato, aunque no fue esta una de las dos instituciones que propuso su nombre para dirigir Ciespal”.
Este Diario intentó dialogar, sin lograrlo, con Peña y con el actual director, Fernando Checa, quien permanecerá en sus funciones hasta que Sierra asuma. Su elección, no ha traído ningún malestar al interior de la Ciespal, según señaló uno de sus trabajadores.