En el salón del Municipio de Quinindé el alcalde de ese cantón, Manuel Casanova, explicó el trámite que realizará para impugnar su destitución. Foto: Bolívar Velasco/ EL COMERCIO.
El fallo que la Contraloría emitió para destituir al alcalde de Quinindé, Manuel Casanova, es de última instancia y no está sujeto a apelación. Esto lo reconoció Casanova durante una rueda de prensa que ofreció este lunes 19 de enero del 2015 en el salón municipal de este cantón de la provincia de Esmeraldas.
Ahí el alcalde señaló que la vía que permite impugnar esta decisión es el Tribunal Contencioso Administrativo con sede en Portoviejo. Ante esta dependencia presentará su alegato dentro de los 30 días que le permite la ley. “En la Contraloría está agotada toda la diligencia. Presentamos nuestras justificaciones ante lo que nos examinaron pero la resolución se dio. Ahora nos defenderemos en derecho. Aclaro que es un asunto administrativo. No hay dolo ni peculado”.
El pasado 13 de enero del 2015 Manuel Casanova, de las filas de Alianza Pais, fue sancionado por la Contraloría con la destitución de su cargo.
El organismo halló responsabilidad administrativa culposa por presunto nepotismo, irregularidades en la calificación del personal al sector público, en la valoración predial de los años 2010 y 2011, y en la adquisición de materiales de construcción y alquiler de vehículos y maquinaria.
La resolución del organismo fue emitida el pasado 13 de enero pero se hizo pública el sábado 17 de enero.
El alcalde Manuel Casanova aseguró que el dictamen se difundió en las redes sociales y en una nota publicada por el diario estatal El Telégrafo a cuyo medio acusó de inobservar el artículo 22 de la Ley de Comunicación.
Según Casanova, El Telégrafo no consideró su punto de vista en la publicación del sábado 17 de enero. “Voy a presentar una queja en la Supercom para que se aclare esta situación”, sostuvo el alcalde. No obstante el diario público en una publicación de su edición de este lunes 19 de enero incluyó la versión del Alcalde.