Erika Tayhing Campbell
Escribo a EL COMERCIO realmente hostigada de lo que me ha tocado pasar últimamente en mis viajes a otras ciudades de mi país.
Es triste que no pueda tener la tranquilidad de tomar un bus sin tener que pensar que estoy arriesgando mi vida por personas inescrupulosas mal llamados también profesionales del volante, que por querer llegar lo mas rápido posible al destino al que van, no les importe peligrar la vida de las personas que ocupamos este medio como una forma de movilizarnos.
Sucede que en días anteriores me tocó dirigirme a la ciudad de Quito, y tomé un bus de Transportes Ecuador, a las 22:30 desde el cantón Babahoyo con la finalidad de estar temprano.
Pero sucede que me tuve que dirigir al chofer por tres ocasiones ya que este señor iba a exceso de velocidad, que un par de veces estuvo a punto de chocarse, en ese momento es cuando me pregunto.
Si nosotros por no tener un vehículo de uso particular merecemos el atropello de estas personas, de la cual en el lapso del viaje sin pensarlo dependemos de ellos.
Acaso no tenemos el derecho a la seguridad, a la tranquilidad de saber que retornaremos seguros a nuestros hogares o tendremos que seguir con el corazón en la boca, pensando que podemos ser parte de esas estadísticas solo por la irresponsabilidad de unos cuantos que se hacen llaman profesionales del volante, cuando en realidad son asesinos con licencia, por el simple hecho de no ser precavidos.
Señores choferes, preferimos perder un minuto en la vida que la vida en un minuto…
Y hago un llamado a la concientizacion de parte de cada uno de nosotros, para que no se nos siga vulnerando nuestro derecho a la vida…
LOS PROBLEMAS DE GALÁPAGOS
Dyci Cobos
El archipiélago de Galápagos camina raudo a su extinción, lo dicen historiadores de la talla de Martínez Gil, Donoso Game , Octavio Latorre y ecologistas como Patricia Herrman.
El Ministerio de Medio Ambiente lanza su teoría de que la única forma de salvar a “Las Galápagos” es crear en la población una actitud no sólo proactiva sino asertiva en la vida cotidiana, es decir, empujar diaria y permanentemente la protección del hábitat de las islas”.
Soy nativa de la isla San Cristóbal y un recuerdo de mis primeros años es cómo había que retirar con el pie los pepinos de mar, para poder transitar; en el límpido mar los peces se los podía coger con la mano y luego llevarlos a la olla.
Hoy hay más de 3 000 indígenas salasacas que so pretexto de “constructores” se han estacionado en las islas, acumulando miserables casuchas de todo tipo para habitarlas en las peores condiciones, buscarán y depredarán los pepinos de mar ya sea para su alimentación o entregarlos al contrabando.
Lo dice el New York Times: “son jornaleros que llegan a ganar 1 500 dólares mensuales, y obtienen del Gobierno toda clase de subsidios”.
“Los millones” conseguidos por el turismo ocultarán temporalmente el problema, pero luego, la explosión demográfica que ya pasa de los 30 000 habitantes liquidarán a los pájaros patas azules y terminarán con la descendencia de la tortuga Solitario George, si este llega a obtenerla.
ENCUESTAS A LA BAJA
Enrique Cobo Bustamante
Son datos muy interesantes los mencionados en estos días por empresas encuestadoras en diversos medios de comunicación, en los cuales indican que el presidente Correa está bajando tanto en su imagen como en su credibilidad.
Me preocupa que Jaime Nebot, Lucio Gutiérrez y Fabricio Correa aparezcan como los únicos líderes, razón por lo cual propongo formar una fuerza alternativa y propositiva con ideas claras y directas que considere a personas de la valía de Isabel Noboa, Cynthia Viteri, Carlos Vera, Andrés Páez, entre otros.
Quiero manifestar en esta ocasión, ya que tengo el privilegio de conocerlo, que el Dr. Andrés Páez es un ciudadano preparado, decidido, de manos limpias, ecuánime, con una gran sensibilidad en materia social que podría ser una buena opción para un recambio político.
Ahora que ha retornado de un viaje de estudios sería el momento preciso, para que el Dr. Páez tome la posta y el liderazgo de ese Ecuador que todos queremos pleno en valores, producción, riqueza y respeto.
SIGUEN LOS REGALOS DE AVIONES DE COMBATE (I)
Jaime Ordóñez Pallares
El presidente Hugo Chávez de Venezuela acaba de obsequiarnos una flota de aviones supersónicos Mig-50 de combate que los tenía en desuso y ahora el presidente de Brasil Luis Ignacio Lula da Silva está solicitando autorización al Congreso para regalarnos un avión de transporte de tropas, que se halla fuera de servicio.
Según el ministro de Defensa brasilero, Nelson Jobim, esta donación estrechará aún más los lazos de amistad entre los Estados.
Es increíble la generosidad de estos presidentes, que se han dedicado a deshacerse de aparatos “caducados” y trasladarlos a Ecuador, que saben no tiene reparo en aceptarlos, y que de una u otra manera nos comprometen con los gobiernos donantes.
Con estos antecedentes, es de esperarse que no aparezca algún otro generoso presidente que quiera obsequiarnos un lote de medicinas caducadas.
SIGUEN LOS REGALOS DE AVIONES DE COMBATE (II)
Patricio Haro Ayerve
La decisión del Gobierno de aceptar la chatarra aérea regalada por la paranoia de Chávez, es una grave ofensa al honor y a la dignidad de las Fuerzas Armadas, especialmente de la Fuerza Aérea, de sus pilotos, sus especialistas y sus aerotécnicos.
La decisión “política” anunciada por el Ministro de Defensa no ha considerado, por ignorar totalmente, ya que no hay razón para que él conozca, que nuestra fuerza aérea es la única vencedora en un combate aéreo en la historia militar latinoamericana; lo que le hace digna de volar, protegiendo nuestra soberanía, los mejores aviones del mundo y no esa basura voladora que solo intensifica el intervencionismo chavecista en Ecuador, ya que con ella vendrán cientos de “asesores” con el propósito de materializar los protervos intereses de Chávez, ratificando la conformación de la “alianza estratégica” para imponer, en la región, a sangre y fuego el socialismo del siglo XXI.
El nuevo estilo de la inoperancia
Martha E. Viteri P.
Vicente Albornoz Guarderas en su editorial de EL COMERCIO, del domingo pasado, analiza de forma sencilla y comprensible el sentido y las consecuencias de los incentivos gubernamentales, impartidos mediante medidas que aplicadas, han desembocado en inconveniencias que de lo único que dan muestra es de improvisación y una total falta de previsión a los impactos sociales.
Como para rematar este tema, María Paula Romo, aplicando el nuevo estilo estatal de endilgar a otros la inoperancia e irresponsabilidad, dice que no son las leyes promulgadas las que han empeorado el contexto social en inseguridad, sino que se debe a la dejadez del sector judicial.
Esta aclaración a manera de excusa, solo corrobora la improvisación y falta de previsión al poner en vigencia leyes sin estudiar la capacidad de desenvolvimiento de todo lo que involucra su aplicación, y sin el respaldo solvente de todos los actores, solo ratifica irresponsabilidad.
En realidad ya no llaman la atención estos desfaces porque ahora son pan diario, leyes en vigencia sin reglamentos, megaproyectos sin estudios de su realización y si con estudios económico-financieros, como alguien dijo sueltan primero la carreta y detrás mandan al caballo.
En la práctica, los resultados de todo esto está a la vista y los ciudadanos sufrimos las consecuencias.
Siempre los hechos hablarán más alto que las palabras.
EL ESTADO DE ÁNIMO DEL PRESIDENTE
Blanca Bazurto
-Es fundamental que un mandatario posea un ánimo básicamente de servicio a su país, y ello, al menos al principio de la primera campaña electoral, parece que demostró el actual Presidente de la República, y por esto que gran parte de la población votó por él y su tesis de cambio, frente a la inoperancia de la antigua partidocracia.
Por cierto que algunas pocas cosas importantes ha implementado en su gobierno, como el caso de exigir que los profesores se capaciten para mejorar la educación, lo cual está bien dado que el gremio de los profesores en realidad se ha convertido en la sucursal de un movimiento político extremista, impulsor del caos, irrespetuoso permanente del orden público.
En otras áreas del convivir nacional, el Presidente ha demostrado intolerancia total con quienes de algún modo piensan un tanto diferente, y en sus cadenas radiales, conozco (nunca escucho tales trasmisiones desde luego porque son simplemente un ataque de insultos a todo el mundo y también por la demagogia atosigante existente) no hay nada importante.
Y por esto que en las estadísticas de aceptación, el Gobierno Nacional está bajando, pues la población está cansada de tanta propaganda, tanta verborrea y por último por sus broncas diarias con los mismos sectores que apoyaron su candidatura como la respetable clase indígena o el ataque patológico a la prensa.
Y es evidente que también el pueblo está rechazando a este Gobierno por la subida del desempleo, al igual que del costo de la vida y el auge de la delincuencia que está masacrando por todas partes a muchísimas víctimas en el todo el territorio nacional.
Esto, sin contar con algunos hechos que se han dado como la no aclaración total del caso “Chauvín”, del ex ministro del Deporte, etc. (cosas que al menos yo no me olvido) y por último la enredadera que ha ocasionado su mismo hermano Fabricio, un acusador de lo que él llama el “círculo rosa”.
Sí que ese ánimo de servicio al país por parte del Primer Mandatario es ya totalmente dudoso e indudablemente, puro cuento.