Una parrillada fácil y de película
Con lluvia o con sol, bajo techo o a la intemperie, no existe nada más agradable que organizar una parrillada entre amigos para festejar cualquier ocasión.
Tenga en cuenta
Nunca pinche la carne al darle vuelta, para evitar así que caiga grasa o jugos sobre las brasas.
Use una pinza de asador.
Verifique que el pollo no tenga marcas ni golpes y que no tenga demasiada grasa entre la piel y la carne.
No deje nunca la carne de cerdo junto a otros alimentos, pues ella absorbe con mucha facilidad los aromas.Muchos son los secretos que yacen detrás de la propuesta culinaria que encierra una parrillada, secretos que muchas veces se aprenden a través de años y años de experiencia.
Sin embargo, existen algunos consejos sabios y prácticos que pueden ayudar tanto a expertos como a principiantes al momento de elegir los alimentos así como al instante de colocarlos en la parrilla para asarlos.
La primera consideración recae sobre la selección de los productos. Recuerde que lo más aconsejable es seleccionar la carne de un novillo de 1 a 3 años y que pese de 300 a 400 kilos.
En cuanto al pollo, tome en cuenta que su piel luzca rosada, húmeda, y para nada pegajoza. Si luce verdosa o violeta, con el extremo de sus alas oscurecidos, el pollo no está fresco.
Recuerde adquirir uno que pese más de 2 kilos, para que rinda lo necesario. Si compra uno orgánico, este se achicará menos al asarlo.
En cuanto a la carne de cerdo, esta debe tener un tono rosado-rojizo, firme al tacto y que no contenga líquidos. Descongélela antes de cocinarla.
Una vez que ha seleccionado los productos adecuados, concéntrese en su parrilla. Límpiela siempre con un cepillo duro de alambre después de usarla. Los trozos pegados de comida quemada harán que los alimentos tengan un sabor rancio.
Con su parrilla impecable, llega el momento de encender las brasas, las cuales deben mantener la misma intensidad todo el tiempo. La temperatura interna de cocción del bife de carne será de 60 °C (jugoso), 70°C (a punto) o de 75°C (cocido). La del pollo será de 87 °C y el cerdo debe ponerse a asar cuando el carbón no esté al rojo vivo. Recuerde nunca sobrecargar la parrilla pues, de lo contrario, sus alimentos hervirán en lugar de asarse.