Foto referencial. Los administradores de las ferias de vehículos usados en el sur y en el norte de Quito han propuesto al COE Nacional y cantonal, protocolos de bioseguridad para reabrir su operación. Foto: Julio Estrella / EL COMERCIO
El mercado de autos usados se ha visto fuertemente “golpeado” por la pandemia en Quito. Sin embargo, se registra un alza en la oferta online de vehículos de segunda mano.
Los administradores de las ferias de vehículos usados en el sur y en el norte de la capital han propuesto protocolos de bioseguridad para reabrir su operación: desinfección de los vehículos con amonio cuaternario, dispensadores de gel antibacterial, medición de temperatura a comerciantes y visitantes, uso de mascarillas, distanciamiento, etc.
“Esperamos que el COE Cantonal nos dé la autorización”, dice Franklin Lozada, administrador de la Feria de Autos del Sur. Por su lado, Freddy Coronado, de la Feria de Autos del Norte, señala que ya entregaron todo el plan de contingencia y bioseguridad al COE Nacional.
“No dan la apertura, a pesar de que las ferias tienen toda la infraestructura para funcionar. Cada parqueadero tiene 2,75 metros; el plan es trabajar dejando un puesto libre para que sean 5 metros de distanciamiento por cada comerciante. La feria es grande: son 60 000 metros cuadrados”, señala Coronado, quien subraya que el gremio está “sumamente golpeado”.
Vehículos más solicitados en esta coyuntura
Los autos usados más demandados al momento en portales digitales son el Chevrolet Aveo y el Kia Picanto, que oscilan entre USD 10 000 y 12 000. Para el CEO de OLX Autos, Rafael Portilla, esto se debe a varios factores: por un lado, personas que están cambiando un auto de gama alta por uno más económico, para solventar gastos. Por otro lado, son autos solicitados para servicios de delivery, que han tenido un alza en estos meses.
Asimismo, las fuentes coinciden en que la búsqueda de automotores de bajo costo está vinculada con el incremento del subempleo: personas que han encontrado una opción de ingresos en el servicio de entrega a domicilio.
Otros modelos de vehículos de segunda mano demandados son las furgonetas de transporte de personas para empresa privada, cuyo rango de precio oscila entre los USD 16 000 y 17 000.
También hay un incremento de demanda de motocicletas, útiles para servicio delivery. “Las motos chinas son las que más se mueven por precio, desde USD 700 hasta 3 000”, según Portilla.
El administrador de la Feria de Autos del Sur añade que le han consultado por camionetas usadas de cabina sencilla y camiones para el transporte de víveres. Estos modelos cuestan actualmente entre USD 5 000 hasta 15 000.
En portales se registra entre un 20 y un 30% de incremento de oferta de vehículos, en comparación con lo que ocurrió en junio, cuando Quito cambió el color rojo del semáforo a amarillo, después de 78 días de aislamiento por la pandemia.
“La gente necesita tener liquidez para pagar gastos prioritarios, por eso están saliendo de ciertos bienes, y al no tener el espacio físico donde intercambiar se vuelca a Internet”, dice Portilla. En marzo, abril y mayo el negocio estuvo casi paralizado.
En ese contexto, los precios de los autos han bajado entre 5 y 10%, si se compara julio con febrero del 2020.