Tres premios de la paz cuestionados; Hitler, Mussolini y Stalin también habían sido nominados

El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, durante un mitin de campaña. Foto: Reuters

Donald Trump tiene una obsesión por recibir el premio Nobel de la Paz. Y cree merecerlo por lejos. Al menos, cree que lo merece más que su predecesor Barack Obama, quien lo recibió en el 2009.
El Nobel de la Paz no ha dejado de ser polémico. Hay algunos nombres que asombrarían por haber sido nominados: Hitler, Mussolini, Stalin, por ejemplo. Pero hay tres que si lo ganaron y que luego se ha pedido que se los retire.
2009. Barack Obama, una presidencia en Guerra
Ironías de la historia, durante los dos mandatos del demócrata, no hubo un solo día en que Estados Unidos no estuvo involucrado en una guerra. Pero Obama no recibió el premio por su obra, sino por su mensaje de esperanza. Ese año había comenzado sus dos períodos.
Bajo su administración se llevó a cabo la tercera guerra estadounidense en Iraq, continuó la guerra de Afganistán. El país emprendió acciones militares en Libia, Pakistán, Somalia y Yemen.
1994. La cuestión israelí-palestino
El expresidente de la Organización la Liberación Palestina (OLP), Yasser Arafat, el excanciller y el exprimer ministros israelíes, Shimon Peres e Isasc Rabin recibieron el premio de 1994 tras la firma del Acuerdo de Oslo que supuso la creación de un gobierno autónomo y con limitaciones para los palestinos.
Al interior del Comité Nobel de Noruega, hubo serios desacuerdos. Unos de sus miembros, Kaare Kristiansen renunció porque sostenía que las manos de Arafat estaban llenas de sangre. En 2002, varios miembros pidieron que se retire el premio a Peres (era canciller de Ariel Sharon) porque formaba parte de un Gobierno que reprimía a los palestinos.
1991. La represión en Myanmar
Aung San Suu Ky recibió el premio por haber luchado contra la dictadura militar que gobernaba el país. Pero luego, como consejera de Estado, como Canciller de Myanmar, ha tenido un silencio escabroso sobre la represión al pueblo rohingyas, Unas 509 000 personas debieron huir y buscar refugio en Bangladés.
“Estoy decepcionado”, ha dicho Geir Lundestad, quien fue secretario del Comité Nobel entre 1990 y 2014. “Aung San Suu Kyi era una galardonada extremadamente popular y meritoria, heroica, dadas las circunstancias, pero no puedo aprobar su comportamiento respecto a los rohingyas”, agregó.