Nicolás Maduro expuso cuatro puntos para el diálogo con Barack Obama, en su discurso en la Cumbre de las Américas

En el centro, el presidente de Venezuela, Nicolás Maduro en la ceremonia de apertura de la Cumbre de las Américas en la Ciudad de Panamá. Foto: AFP

El presidente venezolano, Nicolás Maduro, dedicó la parte final de su discurso en la Cumbre de las Américas a establecer cuatro puntos dirigidos a su homólogo estadounidense, Barak Obama.
El primero fue pedir a Estados Unidos que rectifique lo que consideró es el error de origen que los ha llevado a lo que tildó de decreto desproporcionado. El documento al que hace referencia es un decreto mediante el cual el país norteamericano establecía a Venezuela como una amenaza. “Creyó Estados Unidos que con la partida física del comandante Hugo Chávez, la revolución bolivariana terminaría”, dijo, pero recordó que el fallecido presidente había dicho alguna vez: “Yo no soy yo. Soy un pueblo, una historia que está viva” y la revolución continuará.
El segundo punto que pidió Maduro a Obama fue derogar el decreto por la vía diplomática-política que se encuentre.
El tercero fue desmontar lo que él llamó una maquinaria de guerra psicológica y militar, en la embajada estadounidense en Venezuela y acusó nuevamente a ese país de supuestos planes para matarlo y derrocarlo. Según Maduro, hay pruebas de ello.
El cuarto punto fue solicitar que se dispongan medidas legales para detener lo que él afirma existe en Estados Unidos: una supuesta conspiración para matarlo, con armas especializadas y hasta aviones militares de por medio. Finalmente, pidió disculpas por lo extenso de su discurso “pero Venezuela está bajo una amenaza”, dijo.