El líder norcoreano, Kim Jong-Un (c), participa en una ceremonia de inauguración de un proyecto de desarrollo residencial en la calle Ryomyong en Pionyang (Corea del Norte) este 13 de abril de 2017. Foto: EFE
El dirigente norcoreano Kim Jong-Un inauguró este jueves, 13 de abril del 2017, con gran pompa en Pionyang, en presencia de medios extranjeros, un imponente complejo residencial, una ceremonia que busca pulir la imagen del país en plena crisis internacional a raíz de su programa nuclear.
Decenas de miles de soldados y jerarcas del régimen, asistieron a la inauguración del complejo de Ryomyong Street, que tiene 5000 viviendas.
El complejo reúne varios edificios y torres de diferentes formas, circulares, cúbicos u octagonales, dominados por un rascacielos de 70 pisos, de una altura de 234 metros.
Se encuentra ubicado cerca del Palacio del Sol Kumsusan, donde reposan los cuerpos de los dirigentes de Corea del Norte Kim Il-sung y Kim Jong-il, abuelo y padre respectivamente del actual líder.
El primer ministro Pak Pong-ju pronunció un discurso en el que elogió a Kim Jong-Un y dijo que el proyecto residencial era una demostración del “espíritu de dedicación del pueblo y del ejército a aplicar, pase lo que pase, las órdenes del partido”.
Ryomyong Street es una “victoria contra las sanciones imperialistas”, agregó Pak Pong-ju, refiriéndose a las múltiples sanciones adoptadas por la ONU contra Corea del Norte por su programa balístico y nuclear.
Desde los departamentos hay vistas impresionantes de la capital Pionyang y de la campiña cercana. Foto: AFP
Algunos expertos temen que Corea del Norte, que busca dotarse de misiles intercontinentales capaces de transportar ojivas nucleares hasta el territorio estadounidense, realice un sexto ensayo nuclear.
Las instalaciones de Tunggye-ri ya están listas para otro ensayo nuclear, según los analistas de “38 North”, una web especializada en el régimen comunista norcoreana.
Algunos especialistas piensan que Corea del Norte podría aprovechar la fecha del 105ª aniversario del nacimiento de Kim Il-sung, este fin de semana, para efectuar su sexto ensayo nuclear.
Estados Unidos desplegó hace unos días un grupo aeronaval hacia la península coreana, después de que el presidente Donald Trump dijera estar dispuesto a solucionar la cuestión nuclear norcoreana solo si China no logra que su turbulento vecino cambie de posición.
Corea del Norte prometió el martes responder al envío “insensato” de esa flota de Estados Unidos y advirtió que estaba lista para la “guerra”.
Al mismo tiempo, los medios de comunicación norcoreanos dijeron que Kim Jong-Un ha supervisado personalmente maniobras militares que consistían en el lanzamiento de paracaidistas para “destruir sin piedad blancos enemigos”.
El jueves, el primer ministro japonés Shinzo Abe advirtió que Corea del Norte, que en el pasado disparó varios misiles en dirección del archipiélago nipón, podía montar en sus proyectiles ojivas llenas de gas sarín.
Sin embargo, el aumento de la tensión no era perceptible esta mañana durante la inauguración del complejo residencial.
Kim cortó una larga cinta roja, saludó a la multitud y luego se dirigió a su limusina negra.
Este es el tercer complejo residencial y el más espectacular inaugurado por el gobierno, que busca presentar al país como una estado próspero y moderno a pesar de que según la ONU el 41% de la población está subalimentada.
En la cumbre de la torre más alta hay grandes apartamentos tapizados de verde con sofás violetas desde los cuales hay vistas impresionantes de la capital y de la campiña cercana. Sin embargo los apartamentos no tienen agua caliente.