Keiko Fujimori al ser detenida en la Fiscalía de Perú este 10 de octubre del 2018. Foto: EFE
La principal líder de la oposición en el Perú, Keiko Fujimori, señaló hoy, 10 de octubre de 2018, desde una sede policial que su detención preliminar por diez días por presunto lavado de activos no tiene fundamentos jurídicos y que se trata de una persecución política.
“La persecución se ha disfrazado de justicia en nuestro país. Me han perseguido 18 años y nunca han mostrado una prueba. Y así, sin pruebas estoy privada de mi libertad, con la frente en alto y el espíritu de lucha intacto”, apuntó Fujimori en un texto publicado en Twitter.
“Esto se llama persecución política!”, subrayó. Fujimori, líder del partido derechista radical Fuerza Popular (FP), fue detenida esta mañana por la Policía al llegar a una sede de la Fiscalía,donde iba a declarar sobre los presuntos aportes ilícitos a su campaña presidencial de 2011.
La medida, que alcanza a otros 19 allegados al fujimorismo, fue ordenada por el juez Richard Concepción Carhuancho, por pedido del fiscal José Domingo Pérez.
Fujimori, de 43 años, permanece en la División policial de Delitos de Alta Complejidad (DIVIAC), en el centro de Lima.
“Desde la DIVIAC les digo: no van a truncar nuestro proyecto político. El fujimorismo es un sentimiento que crece en momentos de adversidad. Esto será solo un capítulo más de persecución. ¡Saldremos más fortalecidos de esta injusticia!”, escribió la dirigente.
La investigación de Pérez apunta a que FP financió sus millonarias campañas de 2011 y 2016 con dinero ilícito, incluso con supuestos aportes de la constructora brasileña Odebrecht, y armó un esquema para delinquir y “lavar” los fondos.
Según ex directivos de Odebrecht, la firma financió en 2011 la candidatura de la líder opositora con 1,2 millones de dólares, que fueron entregados mediante los dirigentes de FP Jaime Yoshiyama y Augusto Bedoya Cámere.
La detención también alcanza a Yoshiyama y Bedoya Cámere, pero solo se ha hecho efectivo con el último, pues el primero está fuera del país.
Fujimori, hija del ex presidente Alberto Fujimori (1990-2000), asegura que financió las campañas con aportes de simpatizantes en cócteles, algo inverosímil para la Fiscalía, que considera imposible que se puedan reunir más de 700.000 dólares por esa vía.