Cerca de dos años tuvieron que esperar familiares de Marilyn Pérez para sepultar en Barranquilla a la enfermera, que falleció en julio de 2020 por covid-19 y su cuerpo fue confundido. Desde entonces, iniciaron una lucha que culminó este jueves 5 de mayo de 2022 “con sentimientos encontrados”.
De la exhumación de los restos, que se realizó en noviembre de 2021, los resultados confirmaron en las últimas horas que sí se trataba de la profesional de salud y así sus seres queridos pudieron darle cristiana sepultura.
La mujer, de 50 años, trabajaba en el Hospital 13 de Junio de Soledad (Atlántico). Sufría de diabetes y llegó a la clínica de El Prado con niveles de azúcar muy altos, por los cuales fue necesaria su intervención.
Días después, sufrió neumonía severa. Durante dos semanas permaneció en la unidad de cuidados intensivos (UCI), hasta el 6 de julio de 2020, en la mañana, fecha de su fallecimiento.
Una sorpresa se llevó la familia Pérez ese día, cuando fue a reclamar el cuerpo y este no aparecía en la morgue del centro asistencial.
“El día que fuimos a recibir su cuerpo, la funeraria no tuvo respuesta por tres horas. Hasta que nos entró una llamada de la funeraria Los Olivos, la cual contratamos. Nos había dicho que mi mamá estaba sepultada en Jardines de la Eternidad y había sido entregada por error a otros familiares”, relató Katherine Hernández, hija de la fallecida.
La impactante búsqueda en la clínica
Por su parte, el esposo de la víctima, Alberto Hernández, buscó el cuerpo dentro de la clínica. En el proceso, supo que ese día hubo retiros para inhumaciones y se trataba de dos hombres que reposaban en la morgue.
Al parecer, se registró un intercambio de cadáveres y sepultaron dos cuerpos equivocados, según la hipótesis de los seres queridos.
En un informe del centro médico, asumieron el caso como “un error humano”, en el cual los responsables del proceso se saltaron partes del protocolo.
Un proceso jurídico con un desenlace que llegó este jueves
Los Pérez iniciaron acciones judiciales para que les permitieran encontrar el cuerpo de la enfermera, pero los trámites dilataron el proceso y la angustia y sufrimiento de la familia.
Asimismo, la Secretaría de Salud del Distrito abrió una investigación a la Clínica El Prado por la desaparición de dos cuerpos, entre ellos, el de la enfermera Marilyn Pérez Liñán.
Este jueves, en medio de la tristeza, allegados de la mujer la despidieron en un cementerio de la ciudad con la sensación de “tranquilidad”, tras librar una dura batalla para permitir, ahora sí, que descanse en paz.