Redacción Quito
María Lema acaba de salir de la estación del Trolebús de El Recreo, ubicada en el sur de la ciudad. Ella quiere cruzar la Maldonado, pero no sabe por dónde hacerlo. Finalmente atraviesa la avenida siguiendo a una pareja de jóvenes que sale al trote. En el sitio no hay pasos cebra que indiquen por qué zona es posible avanzar.
La dificultad para cruzar la vía de seis carriles se complica más en las horas pico (de 07:00 a 09:00, de 13:00 a 15:00 y de 17:00 a 20:00), en este punto que es uno de los más movidos del sur. Ahí se encuentran la estación del trole y el centro comercial más grande de la zona.
Según un estudio de la Policía de Tránsito, por el sector cruzan unas 10 000 personas al día.
“Desde que empezaron a hacer los trabajos en la vía (el Corredor Sur Oriental) sacaron el asfalto y se borraron las líneas. A partir de entonces no han pintado nada”, comenta César Oña.
El joven de 19 años, además, cuestiona: “No sé cómo van a sancionar a los peatones que no cruzan por donde se debe, porque aquí no existen señales. Deben arreglar esto primero”.
En respuesta, la Policía de Tránsito señala que ha emprendido un plan para pintar los pasos cebra, pero que en este tramo la encargada de realizar los trabajos es la Empresa Municipal de Movilidad y Obras Públicas (Emmop).
La Emmop, por su parte, indica que esta labor está en la Gerencia de Gestión de la Movilidad, pero en esta dependencia informaron a este Diario que esta labor tampoco les corresponde.
Ayer las autoridades de la Policía y del Cabildo se reunieron para analizar cuáles son los puntos que no tienen señalización horizontal (el nombre técnico de los pasos cebra), para pintarlos.
Pese a que aún no hay pasos cebra, la Policía de Tránsito tiene en claro que si los peatones cruzan la calle por las áreas no autorizadas, incluso en este sector de la Maldonado, serán sancionados con USD 10, 40, como ordena la nueva Ley de Tránsito. La disposición se aplicará desde el lunes 15.
La falta de señalización horizontal no es el único reparo que tienen los peatones que deben cruzar la avenida. Por ejemplo, Silvia Sarango es una persona con discapacidad. Ella explica que la falta de señalización y mantenimiento hace peligrosa a la vía. “No es solo que no hay por dónde pasar, sino que también existe ripio en los pasos, que hacen que las ruedas se entierren y nosotros sin ayuda no podemos avanzar”.
Cuando Sarango intentó atravesar la vía, su silla de ruedas se atascó en el material de construcción regado en la rampa destinada para las personas con discapacidad.
Otro obstáculo que encuentran los transeúntes es el que refiere David Rojas. El joven dice que el desorden que existe al cruzar la vía es aprovechado por delincuentes, quienes arranchan celulares, carteras y bolsos.
Pero este punto no es el único en la Maldonado que no cuenta con señalización horizontal. Desde el redondel de la Villa Flora, hasta Caupichu (10 kilómetros) faltan seis pasos. Y los pocos que existen están despintados. La ausencia de la señalización también se nota en la intersección de la Maldonado y Pujilí.
Más hacia el sur, el paso cebra ha desaparecido en la entrada al Beaterio. Ahí los peatones cruzan por donde pueden. “Debemos pasar por cualquier lado. Como no hay líneas, los conductores no dejan el espacio para que caminemos”, explica Carlos Moreno.
Los moradores del barrio Nueva Aurora señalan que lo más complicado se produce en la noche y madrugadas. Por la poca visibilidad, los conductores no respetan las intersecciones ni los signos de pare. Incluso dicen que en este sitio se han registrado accidentes. El último fue en marzo de 2008.
Pero no solo los transeúntes demandan el trazado de pasos cebra. También lo hacen algunos conductores que circulan con frecuencia por el sector. Uno de ellos es Andrés Medina. Él maneja un auto pequeño y relata que se detiene donde puede, pues no existe señalización.
La falta de pasos cebra también se evidencia en el ingreso al barrio Caupicho (av. Maldonado y Leonidas Dubles). Una situación similar viven los pobladores del barrio Nueva Vida. Ahí existen dos centros educativos y los alumnos afrontan riesgos para atravesar la amplia calzada.
Testimonio. Sofía Cañar/ Peatón
‘Necesitamos la señalización’
Las autoridades siempre se olvidan de la señalización. No es raro ver que arreglan o cambian la capa asfáltica. Parece que lo van a dejar todo muy bien, pero sucede que se olvidan de los detalles, en este caso de las señalizaciones.
El resultado de esto es que no hay líneas cebra frente al centro comercial El Recreo, que es uno de los puntos en los cuales se concentra la gente del sur. Hay mucha aglomeración. Las personas quieren cruzar la vía y lo hacen por donde sea porque no hay algo que indique por donde hacerlo.
Ahora hay una ley que sanciona a los peatones por no pasar por donde se debe, pero antes de sancionar debieran poner a punto las calles. Pintar pasos cebra, calibrar los semáforos, habilitar los pasos. Si no lo hacen, ¿cómo nos piden que cumplamos la Ley si no existen las garantías para hacerlo?
No sería nada raro que empiecen con las multas en este punto y que nunca terminen de arreglar la avenida. Es más, en esta zona debieran poner un paso elevado, pues la afluencia de gente es muy grande a toda hora. Hay ratos en los que no pueden avanzar las personas ni los autos a causa de tanto desorden que existe.