Un intenso movimiento de vendedores y compradores de cangrejo rojo se registra en el Mercado Municipal Caraguay, al sur de Guayaquil. Tras 34 días de veda, la venta del crustáceo volvió a uno de los puntos tradicionales de distribución de la ciudad y el país.
La veda que prohibía la captura, transporte y comercialización del crustáceo se extendió del 28 de enero hasta este jueves 2 de marzo. El precio del atado de 13 cangrejos fluctúa entre USD 14 y USD 18 (según el tamaño), precio que se multiplica por cuatro para los de la patas más gordas. Es decir, las planchas se comercializan hasta en USD 72.
Los obreros suben las planchas de cangrejo al hombro desde un muelle sobre el río Guayas, hasta donde llegan las lanchas desde distintos sitios del Golfo de Guayaquil. Y salen del mercado por decenas en grandes carreteras.
Cientos de planchas de cangrejos se desembarcaron en la Caraguay en la primera jornada tras una veda de 34 días. Foto: Enrique Pesantes / EL COMERCIO
Locura por el cangrejo rojo
Leonardo Naranjo, del restaurante El Corvinón de Sauces 6, llegó a comprar 20 planchas de cangrejo rojo. “Hoy es una locura, se vende bastante en el restaurante. Y más siendo viernes, luego del fin de mes. En los próximos 15 días la venta es alta en los cangrejales. Mañana vuelvo por 20 planchas más”, dijo.
En los Sauces y Miraflores, al norte de la ciudad, se ubican los principales cangrejales, restaurantes especializados. Los cangrejos seleccionados para restaurantes se vende en USD 180 dólares los 104 crustáceos, anudados en dos grandes planchas, explicó Naranjo.
Jorge Ponce, uno de los vendedores de los 50 puestos del mercado, explicó que la primera veda del año se destina al período de precortejo y cópula de la especie. Y por ello no se registran problemas de maduración del sabor por el cambio de caparazón, que tiene lugar entre agosto y septiembre de cada año.
Tanto en el cortejo como la cópula del cangrejo rojo se realiza exclusivamente en el exterior de las madrigueras. Y la primera veda tiene precisamente el objetivo de proteger a la especie cuando es más vulnerable a la sobrecaptura.
Cargadores suben a cuesta las planchas de cangrejos que desembarcan las lanchas en el muelle sobre el río Guayas, en la Caraguay. Foto: Enrique Pesantes / EL COMERCIO
Más noticias:
Visita nuestros portales: