Esmeraldas tiene otro atractivo
Redacción Esmeraldas
Unos 40 estudiantes de la Universidad Técnica Luis Vargas Torres escuchaban con atención la explicación relacionada con la construcción de los tres puentes sobre el río Esmeraldas.
“Esta obra permitirá ahorrar tiempo y dinero”, decía Elena Rodas, funcionaria del Cuerpo de Ingenieros del Ejército (CEE), mientras señalaba el complejo de 800 metros de puentes y vías.
Esta infraestructura enlazará a la capital esmeraldeña con la parroquia Tachina. Actualmente, en vehículo se tarda 38 minutos, por el sector de San Mateo. Con los nuevos pasos, el recorrido se reducirá a 10 minutos.
Los estudiantes, protegidos con cascos plásticos, caminan despacio por la isla Luis Vargas Torres. A lo lejos se observan las moles de cemento y las estructuras metálicas que levanta el CEE. También un ejército de obreros que sueldan, transportan piedras, mezclan cemento...
Desde hace un mes, los puentes sobre el estuario del río Esmeraldas se han convertido en el nuevo destino turístico de la ciudad.
Esta iniciativa tiene el apoyo de la Dirección Provincial de Turismo. Ana María Rodríguez es la encargada de armar los recorridos, que se realizan cada sábado.
Los interesados deben inscribirse en la Dirección de Turismo. Se arman grupos de 40 personas. Hasta ahora se ha dado prioridad a miembros de instituciones públicas y privadas.
El último sábado, los universitarios se concentraron en las oficinas de la Dirección de Turismo, desde allí partieron en un autobús hasta el campamento.
Como cada sábado, durante 30 minutos, Pablo Villarroel, jefe del Grupo de Trabajo de Esmeraldas, explicó los detalles técnicos de la obra. Usando mapas, indicó el trazado de los puentes. También ponía énfasis en los plazos. “La obra empezó el año pasado y debe estar lista en noviembre”.
Los estudiantes aprovecharon la oportunidad para hacer preguntas. La mayoría de inquietudes estaba relacionada con la ejecución de la obra y los impactos ambientales en la zona.
A Rubén Cortez, alumno de la Escuela de Ingeniería Forestal, le llamó la tención el proyecto de replantación del manglar, que se ejecutará en la parte norte de la isla. “Antes de venir acá solo conocíamos que se construían puentes y que se iba a destrozar al medioambiente”.
El profesor Sócrates Serrano coincide con esa opinión. Añade que esta práctica se debería aplicar en todas las obras de trascendencia del país. Su propuesta busca involucrar a la ciudadanía en los proyectos de desarrollo, para que conozca los verdaderos alcances y saque sus conclusiones.
En Esmeraldas, precisamente, al inicio de los trabajos hubo sectores que se opusieron al proyecto. La figura más visible fue la del alcalde Ernesto Estupiñán.
El Burgomaestre se quejó por la falta de promoción de la obra y propuso que la carretera que enlazará a los puentes corra por el continente y no atraviese la isla.
Con ello buscaba que se construyan obras complementarias, como el alcantarillado. Ese planteamiento, en opinión de los encargados de la construcción, exigía un incremento en el presupuesto, que actualmente es de USD 66 millones.
Al final del paseo, los visitantes reciben un refrigerio. Yulisa Arcentales, profesora de la Escuela de Ciencias Agrícolas, dice que este tipo de experiencias ayuda a que los estudiantes se conecten con la realidad de su entorno.
Las visitas guiadas continuarán hasta que concluya la obra. 120 personas llegan cada mes al sitio.