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Vizcaya, en Tungurahua, saca la mora a pie y por lodazales

Miguel López, comerciante, compró la mercadería a los productores.

Miguel López, comerciante, compró la mercadería a los productores.

Los agricultores de Vizcaya sacaron sus productos cargándolos en su espalda. Foto: Glenda Giacometti / EL COMERCIO

Una trocha abierta en medio del lodo y piedras se convirtió en la única vía de acceso para los habitantes de la parroquia de Vizcaya.

Las fuertes lluvias registradas desde el jueves pasado y los derrumbes que bajan de las montañas destruyeron varios tramos de la carretera de esta parroquia de Baños de Agua Santa (Tungurahua). Allí se produjo el hundimiento de 300 metros de la vía y se presentaron 20 deslaves. Al menos, unas 130 familias están incomunicadas.

Los militares, bomberos y un grupo de trabajadores del Municipio de Baños abrieron el estrecho camino, que desde el lunes es usado por los afectados para sacar sus productos agrícolas al mercado.

Ellos emprenden caminatas de hasta una hora y media para llegar al otro lado, en la zona de San Pablo, donde unas pocas camionetas esperan a los pasajeros para llevarlos hasta la ciudad de Baños. Otros deben caminar una hora más para llegar a la parroquia Ulba.

Cargan en sus espaldas cajones llenos con mora, quesos y otros productos para comercializar en el mercado o entregar a los comerciantes que los esperan en San Pablo. “La mora se está pudriendo; con el cierre de la vía y las lluvias no hemos podido cosechar. Nos afecta, porque no podemos sostener a nuestras familias”, dice preocupado Marco Silva, un morador de Vizcaya.

El lunes caminó desde el centro poblado, cargando ocho cajones con mora de siete libras cada una. Ataviado con botas de caucho y una chompa gruesa para la lluvia cruzó a paso lento -para no resbalarse-, sobre el abundante lodo. Al otro lado Miguel López, comerciante de mora, lo esperaba para comprar su frágil mercadería.

Miguel López, comerciante, compró la mercadería a los productores. Foto: Glenda Giacometti / EL COMERCIO

Habitualmente, Silva entrega 30 cajones de mora cada dos días, sin embargo, las lluvias y los fuertes vientos destruyeron parte de la producción. De las 1 600 plantas que tiene 400 se viraron y las constantes precipitaciones hicieron que la fruta se pudriera. Por cada caja recibe USD 4.

El comerciante cuenta que el cierre ha impedido sacar 400 cajones diarios de mora de Vizcaya. “No he logrado entregar en Quito y en Cuenca donde vendo el producto”.

El alcalde de Baños, Luis Silva, realizó un recorrido por las zonas afectadas. Según él, los habitantes de Vizcaya dedicados a la producción de la mora y la ganadería son los más afectados. Al menos 3 000 litros de leche diarios dejaron de venderse en esa zona. Tampoco la mora -lo poco que quedó-, que es el principal ingreso económico familiar.

Con la ayuda de los militares, bomberos y trabajadores del Cabildo se distribuyen agua y alimentos a los pobladores, que están bloqueados. En total se entregaron 300 raciones alimenticias a la gente que está aislada, indica el Alcalde.

Un grupo de militares de la Brigada Galápagos dio apoyo a los perjudicados. Foto: Glenda Giacometti / EL COMERCIO

En el recorrido de evaluación por el centro poblado y zonas aledañas se determinó que la producción de mora fue afectada en un 40% y que la mayoría de las vías secundarias está dañada. “La situación es complicada para las 130 familias que viven en la zona”.

Jairo Fuentes es otro de los perjudicados. Los deslaves arrasaron con cuatro piscinas donde criaba 5 000 truchas. El joven, de 25 años, se lamenta porque las pérdidas superan los USD 10 000. “Me quedé sin nada, con los brazos cruzados”. Ahora deberá buscar ayuda para montar nuevamente el criadero, con el fin de vender otra vez a los restaurantes, que eran sus clientes.

El Servicio Nacional de Gestión de Riesgos y Emergencias (Sngre) también evalúa los daños en Vizcaya, en Baños, y en El Triunfo, en Patate. Diana Loroña, coordinadora Zonal de la entidad, dio un informe preliminar con los datos recolectados por el personal de la Cruz Roja, Brigada Galápagos y de los municipios.

Se determinó que en El Triunfo fueron afectadas 171 familias, de las cuales 30 son damnificadas y 18 fueron llevadas a familias acogientes, porque sus viviendas presentan daños. En Vizcaya, 85 familias están perjudicadas, ya que perdieron parte de sus cultivos.