El Instituto Geofísico de la Escuela Politécnica Nacional informa que el flujo de lodo (lahar) fue pequeño y no causó daños.
El flujo de lodo (lahar secundario) fue detectado el sábado 22 de abril del 2023 por la estación sísmica BNAS.
Esta máquina registró un incremento de la señal sísmica en la banda de alta frecuencia.
El flujo de lodo fue de tamaño pequeño y descendió por la quebrada Cutzulao/Agualongo dentro del Parque Nacional Cotopaxi. El evento no causó daños según los reportes.
Durante toda la mañana de este domingo 23 de abril, el volcán permaneció nublado, por lo que no se pudo ver la actividad en superficie.
El informe del Instituto Geofísico indica que no se detectaron emisiones de ceniza en las últimas 24 horas.
La agencia estatal de Estados Unidos, Washington VAAC, tampoco dio alertas sobre la salida de la ceniza.
En cambio, el sistema satelital Mounts reportó 854,6 toneladas de dióxido de azufre (SO2), medidas a las 13:14 del 22 de abril.
El volcán Cotopaxi comenzó su nuevo proceso eruptivo el 22 de octubre del 2022, que se caracteriza por la emisión de cenizas, gases y vapor de agua.
Sin embargo, desde fines de febrero del 2023, el Geofísico informó que existe un descenso en su actividad, debido a una menor cantidad de emisiones.
La primera reactivación del Cotopaxi ocurrió el 14 de agosto del 2015, cuando erupcionó con una gran columna de ceniza.
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