Un hombre fue sentenciado a 26 años de prisión por el delito de femicidio tras apuñalar a su esposa en frente de sus cuatro hijos y los padres de la víctima en Archidona, Napo el 22 de noviembre de 2022.
Según probó Fiscalía, el hombre cometió el crimen ante la negativa de su cónyuge de retomar la relación sentimental tras cuatro meses de haberse separado debido a los continuos eventos de violencia física y psicológica que sufría.
El hoy sentenciado, Humberto Segundo Ch. Sh., utilizó a sus suegros para acercarse a la víctima. Tras convencerlos de que amaba a su hija, juntos acudieron al domicilio que alquilaba la mujer. La intensión de su madre era “hacerle uan limpia para que reflexione y regrese con el individuo”.
Al llegar a la vivienda el hombre trató de persuadir a su esposa Irene, quien no quiso volver con su exconviviente.
Luego de la respuesta definitiva de la mujer, el sujeto ingresó a la vivienda y tomó un cuchillo de la cocina. Pese a la advertencia del hijo mayor que vio la acción, su abuela no le creyó.
Humberto Ch. forcejeó y arrastró a la víctima hasta el exterior de la casa, allí, en presencia de sus hijos y sus suegros la abrazó y la apuñaló en el pecho. Los familiares quedaron sin reacción ante la huida del agresor.
Pruebas del juicio
El Tribunal de Garantías Penales de Napo resolvió que Humberto Ch. acabó con la vida de su víctima “por el hecho de no querer regresar a la vida de violencia de la que quería escapar”.
En la audiencia de juicio, Fiscalía demostró que la conducta del sentenciado se adecuó a las características del delito de femicidio. Por este hecho el hombre recibió una pena privativa de libertad de 26 años.
El dictamen tuvo como pruebas, entre otras, a los testimonios anticipados de tres de los cuatro niños (7, 9 y 12 años) que presenciaron el hecho. “Mi papá apuñaló a mi mamá en el corazón”, coincidieron en su declaración los menores.
La defensa del acusado tuvo relación a que la víctima tenía otro compromiso, lo que “provocó la discusión que ocasionó la muerte violenta de la mujer”. Este argumento fue descartado por los jueces.
El futuro de los niños
La psicóloga del centro de acogida donde permanecieron los cuatro niños durante cuatro meses tras el crimen, afirmó que ningún familiar de la madre o el padre quisieron hacerse cargo de los menores argumentando problemas económicos.
Sin embargo, se está trabajando en el proceso de reinserción familiar con un pariente materno que cuidará de los pequeños.
“Los niños presentan cuadro depresivo y autolítico generado por haber vivido situaciones de violencia y presenciado el femicidio de su madre, y temen que su padre salga en libertad y les quite la vida”, declaró la profesional de salud.
Los menores continuarán recibiendo ayuda psicológica y psiquiátrica.
Más noticias: