La época de lluvia genera preocupación en la población de Ambato. Las enfermedades respiratorias son uno de los males más comunes en la capital de Tungurahua.
Las constantes emanaciones de ceniza del volcán son una de las principales causas, explica el neumólogo Jaime Vásquez. “Es común que después de las erupciones se produzcan epidemias de gripe y aparezcan alergias, especialmente en los niños”, añade el galeno.
En la población, según los datos de Salud, después de la reactivación del coloso, en octubre de 1999, se han presentado más casos de molestias en las vías respiratorias. Luego de las caídas de ceniza, el 70% de la gente se enferma.
Además de la gripe y los resfriados, la parasitosis es otra de las afectaciones frecuentes en la urbe.
Según el médico general, Luis Calle, la parasitosis es un mal causado por protozoos, vermes o artrópodos. Se puede adquirir a través de los alimentos, del agua contaminada, por la picadura de un insecto o por contacto sexual.
Calle asegura que al menos el 80% de las personas que viven en las zonas rurales puede sufrir molestias por los parásitos debido a las malas condiciones sanitarias y a la falta de servicios básicos.
Otro de los padecimientos más comunes en Ambato es el cáncer, especialmente el cérvico uterino. En el Hospital de Solca de Ambato, de 10 pacientes con cáncer de útero, 6 tienen in situ (inicial) y 4 son invasores (avanzados).
En la casa de salud, hasta septiembre de este año, se recibieron siete casos de cáncer del tipo avanzado. El cáncer mamario, de piel, de tiroides, de estómago, de próstata también son comunes en la región. Si se detecta a tiempo, sí se puede curar, añade Nalo Martínez, director médico de Solca.
El oncólogo Carlos Hidalgo explica que lo que falta en la provincia es una conciencia del papanicolaou. “Las mujeres no se realizan este examen que es recomendable hacérselo una vez cada año”.
Tomando en cuenta que el 75% de las mujeres está expuesto a contraer el Virus del Papiloma Humano (VPH), el mejor consejo para las féminas es que se hagan la prueba. En Solca, el examen cuesta USD 5 y no necesita de un pedido médico para realizárselo.
Eso sí, aclara Martínez, hay que cumplir con tres requisitos. No estar durante el período menstrual, no haber tenido actividad sexual las 48 horas anteriores al test y tampoco haber usado medicamentos intravaginales como óvulos.
Pero, los ambateños más pequeños también tienen su propia enfermedad común. La falta de prácticas de higiene oral produce problemas de salud bucal.
La odontóloga Carmen Bucheli cuenta que el deterioro de los dientes y muelas es habitual en los niños, principalmente en los que residen en el sector suburbano.
“Lastimosamente no hay buenas costumbres. Hay que recordar lavarse los dientes tres veces al día, después de cada comida. Los chequeos deben ser periódicos para poder hacerse limpiezas. Las consecuencias son terribles, porque implican la pérdida de los molares”, finalizó la especialista.
Asimismo, las malformaciones de los pies son recurrentes en las zonas periféricas. Calle cuenta que la gente al no utilizar zapatos le hace un gran daño a los pies. “Recomendamos ponerse plantillas ya que caso contrario la solución es operarse y eso es muy costoso”.
Punto de vista
Moisés Naula, médico epidemiólogo
‘La mala alimentación puede causar enfermedades’
Uno de los problemas más graves que se presenta en la región es que las personas no saben alimentarse.
La mayoría de gente opta por la comida chatarra, los fritos, las gaseosas, porque es lo primero que encuentra a su paso y son hasta más económicos.
No se dan cuenta de que la fuente de la mayor parte de enfermedades, incluso y según estudios, del cáncer. Dentro del cuidado se deben tomar en cuenta algunos detalles útiles como la diversificación de los alimentos que se ingieren; la combinación de vegetales con cereales.