La concretera saca un buen mortero
Redacción Construir
La mezcladora y la concretera son las más utilizadas. Son más rápidas y permiten una mezcla más homogénea, con lo que se gana en tiempo y calidad, según Guamaní.
El preparado de los diversos materiales para fabricación del mortero o el hormigón en hormigonera varía con respecto al trabajo manual.
La mezcla del mortero de forma manual tiene varias limitaciones. Una de ellas es que la dosificación varía entre una preparación y otra, lo que afecta a la calidad total del hormigón.
Para efectuar una buena dosificación de la mezcla, se debe seguir un proceso. Primero vierta dos litros de agua dentro de la cuba de la hormigonera. Luego añada el ripio o grava y, a continuación, la arena. Todo en las proporciones indicadas en el gráfico, explica Guamaní.
Deje que se mezcle por algunos minutos y, luego, incorpore poco a poco el agua, hasta que obtenga la mezcla deseada. Para facilitar esta tarea existen ahora sacos de hormigón y mortero predosificados.
Con solo adicionar agua al contenido del saco, se obtiene una pasta homogénea y no se corre el riesgo de equivocarse en la dosificación de cada material.
Esta pasta siempre será muy parecida a la preparada anteriormente. Esto ayuda a obtener una construcción homogénea.