La Constitución dice que la seguridad es facultad del Gobierno central ¿Qué pueden realmente hacer los municipios?
Ellos tienen un rol fundamental en el eje de prevención. Dentro de lo que es el trabajo de la Policía, que tiene ejes de prevención, inteligencia e investigación, es en el primero en donde puede articularse el trabajo de los municipios. Hay que ser claros en que el liderazgo es del Ejecutivo. Él tiene que plantear las prioridades. Por eso debe establecer un plan para tener una estrategia de seguridad integral y ahí articular el trabajo de los municipios en el eje de prevención. Eso se traduce en identificar programas y proyectos a nivel local que puedan fortalecer la presencia del Estado en el territorio.
¿Hay ese plan integral?
Es lo que se creía que se iba a presentar el lunes pasado a prefectos y alcaldes. Era lo mínimo que debía exponerse por parte del Ministerio del Interior. Cuando estuvo en la Asamblea, por ejemplo, habló de la existencia de un plan con diferentes ejes. El lunes debía haber una exposición de esos ejes del plan de seguridad integral y eso aterrizarlo en las acciones que se esperan articular con los gobiernos locales en cuanto a prevención. Sin embargo, de lo que se pudo mirar, no se hizo esa presentación y no se explicó cómo se va a realizar esas articulaciones.
El Presidente tuvo una primera reunión con alcaldes. Ha dicho que el enemigo es el narcotráfico ¿Qué pueden hacer los municipios frente a ese nivel de delincuencia?
El narcotráfico vinculado a la delincuencia organizada debe asumirlo directamente el Gobierno, a través de las funciones que cumple Policía y Fuerzas Armadas. El trabajo de los municipios es para construir intervenciones integrales de mediano y largo plazo. Si no queremos solo generar parches que después producen problemas se debe trabajar en conjunto con las municipalidades para hacer una presencia efectiva en los territorios. Los municipios deberían tener una intervención con otras instituciones del Estado como las coordinaciones zonales del MIES, Deporte y Salud para recuperar esos territorios. No se recuperan esos espacios solamente con una militarización y una presencia masiva de policías.
No solo el narcotráfico es una amenaza, hay incremento de asaltos, robos, femicidios. ¿Qué hacer frente a esta situación en el país?
Tenemos herramientas que la Policía ya utiliza. Por ejemplo, se hace una georreferenciación del delito con su sistema ‘David’, en donde se puede ubicar con mapas de calor los lugares en los que se concentran los delitos comunes. Entonces, con esa información, los municipios pueden tomar acciones puntuales en conjunto para fortalecer el trabajo del policía comunitario y de la prevención desde los barrios. Se pueden activar las redes de comunicación, también reactivar las alarmas comunitarias y los botones de auxilio. Hay estrategias exitosas que se han resaltado por organismos internacionales. Por ejemplo, la línea verde y la línea blanca. Se trata de recuperar el espacio público con áreas verdes, pero también con mayor iluminación y alumbrado. Son pequeños gestos pero que dentro de las competencias del Municipio se pueden tomar y ejecutar de manera focalizada con la información de la Policía.
¿Qué efecto tienen las acciones que se realizan en cada cantón para enfrentar la inseguridad?
Ese es uno de los problemas. Deberían ser acciones articuladas en el plan. Está muy bien que se emitan ordenanzas que permitan disminuir el que haya el cometimiento de un delito. También se ha mencionado, por ejemplo, el limitar que dos personas estén en una moto. Esto para tratar de disminuir el uso de esas herramientas porque se observa que es parte del modus operandi de las organizaciones criminales. Entonces, creo que sí son medidas que podrían tomarse, pero de manera articulada, no de manera espontánea por parte de los municipios.
¿Cuáles son los principales problemas para los municipios en lo relacionado con seguridad?
Es un tema de priorización de acciones. Se los puede orientar adecuadamente sobre en dónde pueden focalizar sus acciones. Pero no se les puede exigir si no se les entrega los recursos. Porque muchas veces los municipios tienen distribuidas sus prioridades en otras necesidades ciudadanas. Eso es un primer nivel. Otro nivel es que no se puede delegar funciones tan delicadas a municipios que muchas veces no están en la capacidad de gestionar temas básicos o de administración local que podrían ser muy generales. No podemos comparar un municipio como el de Guayaquil y Quito con otros más pequeños.
Hoja de vida
La entrevistada es politóloga. También tiene un posgrado en Ciencia Política, con mención en Asuntos Públicos otorgado por la Universidad Panteón Sorbona de París (Francia). Además, es especialista en Servicios de Inteligencia por la Universidad Nacional de Educación a Distancia (UNED), de España. Su formación se ha centrado básicamente en temas de seguridad, defensa e inteligencia.