BMW y Bridgestone son las nuevas bajas en la F-1
Tokio y Berlín. DPA y AFP
El mayor fabricante de neumáticos del mundo, Bridgestone, anunció ayer que para el fin de la temporada 2010 dejará de ser proveedor de la F-1 por motivos estrictamente económicos.
En un sorpresivo comunicado, la empresa japonesa indicó que los recursos propios serán dirigidos en forma más intensa al desarrollo de tecnología de innovación y productos estratégicos.
Bridgestone sigue así a otras compañías, como la automotriz Honda y BMW, que se alejan de la Fórmula 1 a raíz de la crisis.
“La decisión tomada por la junta directiva viene tras unas evaluaciones considerables y largas y se basa en la necesidad de la compañía de redireccionar sus recursos hacia un desarrollo más intensivo de tecnologías innovadoras”, explicó el director deportivo, Hiroshi Yasukawa.
Bridgestone era proveedor desde 1997 y suministraba en exclusiva desde comienzos de 2008, cuando su competidora Michelin dejó la competición.
La crisis económica global golpeó con fuerza a la empresa, que perdió 38 000 millones de yenes (USD 426 millones) en la primera mitad del año.
Pero es posible que la crisis económica no sea la única razón de esta serie de retiradas y que los industriales necesiten ahora menos ese escaparate para vender a unos consumidores que hoy buscan vehículos seguros y económicos más que bólidos.
“No creo que (Bridgestone) deje el deporte del motor solo por la mala situación económica”, comentó Tatsuya Mizuno, director de la consultoría Mizuno Credit Advisory de Tokio.
El fabricante alemán BMW también es otra de las sensibles bajas de la F-1, que corrió el pasado domingo su última carrera.
El piloto alemán Nick Heidfeld, quinto en el Gran Premio de Abu Dabi, tuvo que esforzarse para no perder al final la concentración ante la tristeza de la despedida. Mientras manejaba, los empleados de BMW se firmaban camisetas y se tomaban fotos como recuerdos. La noche anterior, los empleados departieron en una fiesta, que más bien fue una reunión de melancólicos.
Tras 70 carreras como equipo propio, el domingo se puso fin al capítulo. A ello hay que añadir 247 participaciones en Fórmula 1 en calidad de suministrador de motores, de 1982 a 1987 y de 2000 a 2005. 20 victorias y el título mundial en 1983, conquistado por el brasileño Nelson Piquet, realzan este período.
El destino del equipo es incierto. Más de 400 puestos de trabajo están en peligro si, al final, el grupo Qadback no asume el equipo de BMW-Sauber, cuyo jefe es Mario Theissen. Los motores serían suministrados por Ferrari, pero todo dependerá de que tenga una plaza para 2010.
Theissen y Heidfeld están esperando que todo se aclare, aunque el polaco Robert Kubica no quiso correr el riesgo del desempleo y ya firmó para Renault.