Santiago. DPA
Como si fuera un apóstol, o al menos un monje venerado, el técnico argentino de la selección chilena de fútbol, Marcelo Bielsa, recorre el país hablando de su filosofía de vida a mineros, políticos y artistas.
Sea en el pueblo de las llamadas ‘brujas’ de Salamanca, dentro de un yacimiento, en un auditorio edilicio o en una feria de libros, el DT argentino no cesa de responder preguntas a expertos y neófitos del balompié.
El martes, por ejemplo, arribó al paupérrimo poblado minero de Salamanca, a 400 kilómetros de la capital, donde apenas viven 24 000 almas, casi todas de pieles curtidas por el sol del desierto. Allí, en la sede de la Municipalidad, charló extensamente con autoridades y ciudadanos, que lo despidieron con una ovación, como si fuera la final del Mundial de Sudáfrica 2010, como se festeja a los caudillos.
Luego viajó hasta el yacimiento cuprífero Los Pelambres, para dialogar con 200 mineros sobre temas como el respeto de los valores, la conducción con liderazgo y la motivación como cumplimiento de las metas.
También reveló algunas historias desconocidas de la selección, como la de Jean Beausejour, un chileno negro, descendiente de haitianos, que Bielsa no pensaba convocar. El zurdo apareció ante los ojos de Bielsa por primera vez en los ‘play off’ del Clausura 2007, en el estadio de La Florida, cuando jugaba para Audax Italiano. Al DT lo sentaron en una esquina del escenario y los directivos del equipo ‘italiano’ le pidieron que observara al atacante.
Desde entonces, lo tomó en cuenta y ahora Beausejour, gracias a su proyección en la selección, juega en el América de México, al que llegó en una operación que costó USD 3 millones.
Otra historia que reveló Bielsa fue la de Carlos Carmona. El DT confesó que no le tenía fe a este jugador pero que lo llevó a Toulon (donde Chile quedó finalista) por insistencia Eduardo Berizzo, su asistente técnico. Carmona aprovechó su oportunidad y Bielsa lo incluyó en su nómina.
La narración arrancó aplausos, pues Carmona proviene justamente del norte chileno y es un símbolo de superación, pues ahora juega en el Reggina.
La euforia por escuchar a Bielsa es tal que el embajador de Argentina en Chile, Ginés González, le pidió que hablara en la próxima Feria Internacional del Libro de Santiago, como símbolo de la integración chileno-argentina.
Así, ante artistas, escritores y curiosos, el 6 de noviembre Bielsa volverá a hablar de sus obsesiones, ahora en una estación de trenes devenida en un centro cultural, para luego volver a las adustas piezas donde vive en un centro de entrenamiento, como si fuera un monje del fútbol.
Luego vendrán los ensayos, pedidos por Bielsa para empezar a definir el equipo mundialista. El primer ‘sparring’ será Paraguay, el 4 de noviembre en Huachipato. El segundo será Alemania, el 14 de noviembre, en Colonia. Ambas selecciones están clasificadas a Sudáfrica 2010.