‘Tener un aliado en el Gobierno quizá facilite la obra municipal’
Desde su experiencia como Alcalde, ¿qué trabas se encuentran en la ejecución de obras con el Gobierno?
El arte del buen gobierno se fundamenta en la subsidiaridad. Quiere decir que el Gobierno central, el intermedio y el local trabajan juntos, coordinadamente para servir al pueblo que los eligió. Pero siempre ha pasado que el presidente de un partido se olvida de que cuando nos eligen somos alcaldes de la ciudad, no de un partido político.
HOJA DE VIDA
Paco Moncayo
Fue Jefe del Comando Conjunto de las Fuerzas Armadas. Se retiró en 1998.
En 1998 fue elegido diputado por la Izquierda Democrática. Ahora es asambleísta por Pichincha con el Movimiento Municipalista.
En 2000 se posesionó como Alcalde y permaneció en el puesto por ocho años y 5 meses.¿Qué ha pasado en Quito?
Desde el Gobierno central se empieza a respaldar a los alcaldes de su partido porque consideran legítimo reforzar la presencia partidaria en el país.
¿Usted vivió celos políticos de este tipo en su gestión?
Sí. Se refleja cuando comienza el Gobierno central a pelear por hacer una canchita por aquí, a cambiar el piso de un mercadito por allá. Buscan ganar popularidad y opacar al Alcalde.
¿Eso le pasó a usted?
Sí. Pero con la gente les va mal porque el pueblo no es tonto, las personas saben qué responsabilidad tiene cada uno al momento de hacer las obras.
¿En qué casos tuvo trabas en su gestión municipal?
“La mayoría en el
Concejo ayuda en la
gestión municipal”Para hacer la vía Gualo-Aeropuerto, nos retrasaron el proceso. Estuvimos estancados un año sin recibir el aval del Gobierno para el préstamo, ahora que termina de construirse el aeropuerto, en el 2010, no vamos a tener vía directa. Lo mismo sucedió con el programa Laderas del Pichincha en el sur de la ciudad. Estuvo el aval para el préstamo del BID y no salió del Ministerio de Finanzas. Eso es violar los conceptos de la buena gestión en la cual, se entiende, que somos aliados: el presidente, el prefecto y el alcalde.
¿Durante ocho años tuvo gobiernos opositores que complicaron su labor?
“Lindo tener un presidente que me diga aquí está la plata”
Paco Moncayo
Ex alcalde de QuitoTuve buenos y malos ratos. Por más que los gobiernos hayan querido, no hubo un apoyo fantástico para Quito. Nos desarrollamos solos y con créditos externos. Buscamos financiamiento, acercándonos a los organismos de crédito y peleando con la burocracia central, la cual dilata con habilidad los trámites al Municipio.
Entonces, ¿tener una buena relación con el Gobierno es clave para el Municipio?
Sí. El pueblo no elige alcaldes ni presidentes para que se estén peleando entre ellos; el pueblo elige a sus autoridades para que le sirvan, en el Ecuador nos falta aprender a ser equipo.
¿El nuevo alcalde, Augusto Barrera, tendrá más facilidades por ser del mismo partido del actual Gobierno?
Espero que sí. Hay un compromiso que, me imagino, fue negociado al interior del Movimiento País para construir el metro. No va a poder concretarlo si no es el Gobierno el que lo financia. Me hubiera gustado tener ese apoyo del Gobierno para el tren ligero.
¿Él tendrá más apoyo económico, entonces?
El movimiento es el que ganó las elecciones de la Alcaldía, no el señor Alcalde. En realidad espero que tenga más apoyo en las obras.
¿Tener una cercanía con el Gobierno tiene sus riesgos?
Hay distintos riesgos. No digo que en este caso va a pasar así. Un riesgo que existe es que el Presidente diga: ese Alcalde es mío y esta ciudad es mía, tengo que ir a invertir en ciudades que no son mías y que me hacen la vida imposible y que puedo perder apoyo político.
Una semejanza que tendrá el Concejo Metropolitano saliente y el actual es la mayoría. ¿Qué ventajas tendrá?
Cuando asumí la Alcaldía la primera vez, tenía mayoría de la Democracia Cristiana y me hicieron la vida a cuadritos. Cada sesión veía una notoria voluntad de no cooperar. Luego tuve su apoyo. No hay que hacer diferencias en los concejales por ser de tal o cual partido. No pasan de tres las sesiones en las cuales no votamos por unanimidad las resoluciones u ordenanzas. Hicimos un equipo suprapartidario, un equipo con la bandera de Quito. No tuve necesidad de hacer mayorías ni minorías en el Concejo.
¿Eso es lo ideal para gobernar? ¿El nuevo Alcalde tendrá el mismo panorama?
Parece que sí. Pero espero que no se piense ni se trabaje como una mayoría de Movimiento País, sino que sean la representación del pueblo de Quito. Por ejemplo, hoy, soy amigo de los concejales. Nunca tuvimos riñas ni escándalos. Eso le conviene a Augusto Barrera y a Quito. Es un consejo que le doy al nuevo Alcalde.