Redacción Quito
El Municipio y Fundación Natura tuvieron una primera reunión para abordar el tema del manejo de los lixiviados del relleno sanitario El Inga.
Hace una semana, una de las 19 piscinas que recogen los líquidos provenientes de los desperdicios se fisuró. En esa ocasión hubo riesgo de que los lixiviados se derramen causando daños ambientales. El vicealcalde Jorge Albán declaró la emergencia de esa piscina y además denunció que Fundación Natura realizó un mal manejo del relleno sanitario.
El relleno de El Inga
Según Fundación Natura, el relleno sanitario de El Inga fue diseñado para soportar una vida útil de 15 años. Está ubicado a 40 kilómetros de Quito.
En El Inga se realizan dos procesos con la basura. El primero es la disposición final de los desechos, que consiste en la compactación de los desechos bajo tierra. El segundo es el tratamiento de los líquidos lixiviados.
En el relleno sanitario existe una planta de tratamiento para los líquidos tóxicos.Albán señaló que existen informes de fiscalización que detectan problemas en el manejo de los líquidos lixiviados desde hace dos años. En el último documento, dijo Albán, se establecieron 17 incumplimientos por parte de Fundación Natura.
Cecilia Mantilla, secretaria de Ambiente del Municipio, señaló que se realizaron inspecciones en El Inga. “Desde agosto que se han emitido comunicaciones a la Fundación, no son intervenciones de última hora”.
Con esa información, el Municipio exigió a Fundación Natura que presente una respuesta a los informes de fiscalización en un plazo de 90 días.
Sin embargo, en la reunión mantenida el martes entre el Cabido y la Fundación se lograron algunos acuerdos.
Iván Tapia, liquidador de la Corporación Vida Para Quito, a cargo del contrato del relleno sanitario El Inga, afirmó que la reunión con Fundación Natura fue positiva. “Ya se entregó una primera respuesta al informe de fiscalización. Son tres carpetas donde se detallan los argumentos técnicos por los que consideran que no existen incumplimientos”.
Tapia dijo que estos documentos serán analizados para poder emitir un pronunciamiento oficial. Además, se acordó efectuar una visita técnica al relleno sanitario, ubicado a 40 kilómetros del centro de la ciudad. Allí participarán el Alcalde y el Director nacional de Fundación Natura.
Para el liquidador de Vida Para Quito, el objetivo no es finalizar el contrato del manejo de la basura con Fundación Natura, sino hacer que este cumpla con los requerimientos técnicos para evitar una emergencia sanitaria.
Según el Municipio, hasta ayer, las piscinas de lixiviados 6, 16 y 17 mostraban fisuras y filtraciones que aún no han sido reparadas. Los líquidos tóxicos han sido redistribuidos en otras cisternas.
El Vicealcalde denunció también que en el relleno sanitario existen 106 000 metros cúbicos de lixiviados. De ellos, solo han sido tratados 50 metros cúbicos. Allí se exigió que Fundación Natura presente un plan de tratamiento de lixiviados durante la época de invierno.
Xavier Bustamante, director nacional de Natura, aseguró que este informe ya se presentó la semana pasada. Agregó que las piscinas no están saturadas y que pueden soportar las lluvias del invierno. “El Inga tiene capacidad para recibir 18 000 metros cúbicos de lixiviados”.
Según Bustamante, en Quito, se generan 25 metros cúbicos de estos líquidos diariamente y en época lluviosa la cifra se incrementa a 150 metros cúbicos al día. Además, señaló que se han adoptado más medidas de prevención en la planta de tratamiento para evitar riesgos al medioambiente.
Para Bustamante, la reunión con el Municipio también fue positiva porque allí presentaron los descargos a las acusaciones de incumplimiento. Espera que luego de la visita técnica y de otras reuniones “se pueda superar los inconvenientes”.
Otra de las justificaciones que presentó Fundación Natura fue que el Municipio les adeuda cerca de USD 1,5 millones y que el trámite para el pago es burocrático y presenta demoras.
No obstante, el Cabildo señaló que no se ha pagado ese dinero porque Natura no presenta las planillas de junio, julio y agosto. También, cada planilla debe pasar por un proceso de fiscalización para determinar si Natura cumple con las normas establecidas en el contrato.
Tapia sostuvo que hasta ayer se tramitó la planilla de abril y que la de mayo está en procesó. Acotó que con cada incumplimiento se establece una multa. Fundación Natura ha cancelado USD 270 000 por no cumplir con los requerimientos técnicos.