Al ingreso del barrio Bolaños se mantienen varios carteles en los ingresos de cada viviendas, con anuncios de que no se moverán de ahí. Foto: Unidad de Noticias / EL COMERCIO
Para bajar a los valles de Tumbaco, Cumbayá o entrar a Quito, los moradores del barrio Bolaños, al nororiente de Quito, salen a la avenida Interoceánica para esperar un ‘aventón’ o abordar un taxi. Para los vecinos del sector el principal problema es la movilización.
El pasado miércoles, 10 de agosto de 2016, en el Concejo Metropolitano de Quito se presentó varias variantes a la Solución Vial Guayasamín. Sin embargo, los moradores del barrio no terminan de convencerse.
Norma Ligña que vive en Bolaños desde hace 30 años, cuenta que desde el martes pasado, personal del Municipio se acercó al barrio para mostrarles el proyecto. “Vinieron a enseñarnos lo que ya sabíamos. Conocemos que el barrio no será reubicado por completo. Nos hablan de 15 familias pero no sabemos cuáles son y cómo se van a hacer con ellos”.
En esto coincide Jenny Llumiquinga. “Quienes vivimos al filo de la vía seríamos los más afectados. Por eso queremos saber qué mismo se va a hacer porque nosotros no nos vamos a mover de aquí”.
Entre los cambios planteados a la Solución Vial Guayasamín, están la ampliación de la Plaza Argentina, un nuevo corredor de transporte municipal, paradas subterráneas en la Plaza Argentina, reforestación y paradas de transporte que beneficien al barrio Bolaños.
Para Nancy Santillán, otra moradora, el que se habilite un sistema de transporte es lo principal para el sector. “Para salir o entrar al barrio, debemos esperar la voluntad de la gente que va a hacia Quito para movilizarnos. Muchos ya nos conocen y nos llevan. La otra opción es coger un taxi”.
En el sector hay una sola tienda. Según los moradores, para abastecerse de víveres, se compra semanal o quincenalmente. “Nosotros tenemos una huerta que nos ayuda pero no es la realidad de todas las personas del barrio”, señaló Santillán.
Según los cambios anunciados por el Municipio, en Bolaños se implementará de paradas de transporte público en ambos sentidos de la Interoceánica. Estas paradas tendrán pasos en deprimido y elevado para que los moradores no tengan que cruzar esa vía. Sin embargo, no se detalló más sobre la propuesta, aunque reconocen que el Municipio mantiene un diálogo con los moradores sobre este tema.
Al ingreso de Bolaños se mantienen varios carteles en los ingresos de cada viviendas, con anuncios de que no se moverán de ahí. Los moradores están a la expectativa de que se defina quiénes serían los afectados y en qué condiciones se daría una posible reubicación de algunas familias.
Para Santillán, lo importante es que se proponga una alternativa para la movilización de los moradores y esta sea socializada con el barrio. “Hay varias personas que se oponen o están a favor, pero nadie nos muestra una propuesta sólida sobre el transporte. Eso es lo que más necesitamos”.