La Facultad de Comunicación Social de la Universidad Central del Ecuador tiene 350 estudiantes sin título.
Las autoridades han definido reglas generales para su graduación, pero no resulta fácil. Cada caso es diferente.
Las constantes visitas a la universidad para preguntar sobre los trámites se ha convertido en algo cotidiano. A quienes salieron de la universidad antes del 2008 les responden que su única opción es rendir el examen complexivo, que no tiene costo. Es decir, una evaluación general para medir sus conocimientos y saber si merecen el título.
Si es que los egresados no aprueban la evaluación pueden aplicar a un segundo examen, como si fuera un supletorio. Todo el proceso de los dos exámenes se espera que dure hasta enero del 2015, según Dimitri Madrid, decano de la Facultad de Comunicación.
Los que egresaron después del 2008, en cambio, tienen dos opciones: realizar la tesis o acogerse al examen complexivo.
Los cursos de actualización o seminarios están descartados. Jorge Ortiz, director general académico de la universidad, dijo que no había sentido hacer un curso si al final los alumnos igual debían rendir un examen.
En este centro de educación superior, los trámites para conseguir el título son gratuitos, a menos que el estudiante haya perdido ese derecho. Esto ocurre, por ejemplo, cuando no aprobó materias.
Pero el proceso de titulación no es el mismo para todas las universidades ni para todas las facultades. En la Pontificia Universidad Católica, que es particular, los estudiantes de comunicación pueden inscribirse en dos modalidades.
Las denominadas unidades de titulación, que duran dos semestres y permiten terminar la tesis. La otra alternativa es la actualización de créditos, que dura seis meses. El Consejo Académico de cada facultad analiza cada caso para incluirlo en una u otra modalidad.
La PUCE ya contaba con asesorías para la titulación de estudiantes, antes de que se apruebe el Reglamento de Régimen Académico, que norma el proceso de titulación. El número total de estudiantes sin título no se ha determinado aún en este centro. Quienes salieron antes y después del 2008 pueden realizar los cursos.
En la Escuela Politécnica Nacional, en cambio, su vicerrector de docencia Tarquino Sánchez calcula que son entre 3 000 y 8 000 el número de alumnos sin título.
En este establecimiento, el primer examen complexivo está previsto para noviembre. Las personas que lo reprueben podrán tomarlo en mayo del próximo año.
En este plantel se permite que los estudiantes continúen trabajando en su plan de tesis, siempre y cuando lo hayan desarrollado hasta julio de este año. Si hasta esa fecha no se tenía definido el tema o estaba desactualizado el proceso cambia. Ellos deben rendir directamente al examen complexivo, el cual tiene un costo de USD 100 para pregrado y USD 200 para posgrado.
Para el exministro de Educación, Mario Jaramillo, lo ideal sería que los estudiantes salgan de las universidades con el título bajo el brazo y no solo con el plan de tesis aprobado.
Reconoce que uno de los principales problemas es que los alumnos no consiguen tutor y eso retrasa sus proyectos. “En este sentido la Ley ha dado un paso, pues obliga a tener profesores a tiempo completo, para que sean tutores”.